Larry Page y Sergey Brin, que hace 21 años fundaron Google, han decidido dar un paso atrás y abandonar el puesto de CEO de Alphabet que compartían; el nuevo CEO de Alphabet será Sundar Pichai, actual CEO de Google. Y eso puede parecer confuso, hay una buena razón para ello.
Google es la compañía más influyente del siglo XXI, y todo empezó con Page, Brin, y un simple buscador web; a diferencia de otras alternativas de entonces, Google decidía la posición de los resultados con un algoritmo que tenía en cuenta la relevancia de cada página.
Más de dos décadas después, Google es mucho más que un buscador; tiene ramas en una gran variedad de campos, desde la robótica hasta la Inteligencia Artificial, la salud y hasta el diseño de ciudades. Es por eso que, en 2015, se fundó Alphabet, un gigante que integraba a Google y al resto de proyectos.
Los fundadores de Google se apartan de los focos
Page y Brin han comandado Alphabet desde sus inicios, pero siempre detrás de las bambalinas; la verdadera cara de la compañía durante estos años ha sido Sundar Pichai, CEO de la rama de Google.
Hoy, Pichai obtiene el verdadero poder, al ser confirmado como CEO de Alphabet después de que Page y Brin hayan decidido no continuar en el puesto. De esta manera, Pichai se convierte, esta vez sí, en el CEO más influyente e importante del sector; no solo será responsable de los proyectos de Google, sino también de todos los proyectos relacionados con Internet, ciencia, investigación y desarrollo y robótica.
En la carta de despedida, Page y Brin explican que, con 21 años, sienten que su compañía ya es "adulta", y que debería seguir adelante sin la dirección de sus "padres"; seguirán ofreciendo consejo, pero no instrucciones diarias. Al menos, esa es la postura oficial.
La verdad es que Page y Brin no se "van" a ninguna parte. Ambos siguen teniendo asientos en la junta directiva de la compañía, siguen pudiendo influir en todas las decisiones de Pichai, y siguen siendo poseedores de buena parte de la empresa. Han perdido un título, pero desde luego no han perdido poder.
En un momento algo complicado para las empresas de Internet, y justo antes de las elecciones estadounidenses, Page y Brin han decidido alejarse de los focos; pero su influencia se seguirá notando en todas las decisiones de la compañía.
Google es ahora más monolítica
Si este movimiento es sorprendente, no es porque los fundadores de Google ya no tengan un cargo tan público; sino porque la compañía acaba de volver a como estaba antes de 2015.
La fundación de Alphabet y la formación de empresas como Google X, Waymo y DeepMind se ideó precisamente para evitar que todo dependiese directamente de Google; al ganar independencia, estos proyectos pudieron centrarse en sus desarrollos, manteniéndose al mismo tiempo bajo el paraguas de Alphabet.
Ahora que Sundar Pichai es CEO de Alphabet y de Google, esto puede volver a cambiar; llama la atención que sea precisamente en el momento en el que cada vez más políticos piden que empresas tecnológicas como Google o Facebook se dividan en varias para evitar monopolios y un control absoluto del mercado.
Pichai tendrá varios desafíos por delante, y necesitará el control de toda la compañía para enfrentarse a ellos. La llegada de coches autónomos, de conexiones a Internet por métodos alternativos como satélites, o de dispositivos wearables que controlan nuestra salud son sólo algunos de ellos.