Pasarán los años y seguiremos repitiendo lo mismo una y otra vez: que los Tesla tengan Autopilot no significa que tenga "piloto automático" y podamos dejar que el coche se conduzca solo.
La compañía tiene aquí buena parte de culpa, al elegir, conscientemente, un nombre tan propenso a la confusión; puede que Elon Musk sea famoso por no invertir en marketing, pero eso no significa que el nombre Autopilot no sea marketing puro y duro.
En realidad, el Autopilot es una ayuda a la conducción, más avanzada que el resto sin duda alguna, pero una ayuda al fin y al cabo. Eso significa que el conductor nunca debe actuar como si el coche tuviese todo el control, pero eso, ya sea por ignorancia o torpeza mental, es justo lo que hacen muchos de los propietarios.
El accidente de un Tesla, en vídeo
Vamos a cerrar el año con otro ejemplo más, uno que podría haber terminado muy mal pero que, afortunadamente, su responsable ha vivido para contar, a su manera. Un youtuber, con el nombre de Dougal Vlogs, subió hace unas horas un vídeo que se ha vuelto viral, especialmente teniendo en cuenta los pocos suscriptores que tiene en su canal.
Es comprensible, ya que el vídeo muestra el accidente de un Tesla Model 3 grabado desde dentro del coche; lo interesante, cómo no, es que el Autopilot está activo en el momento en el que el coche se estrella. Sin embargo, eso no es lo único en lo que debemos fijarnos.
A continuación ponemos el vídeo para poder explicar los errores que llevaron a este accidente; aunque no provocó muertos ni heridos, ni que decir tiene que creemos que nadie debería imitar este comportamiento.
Para empezar, lo más obvio, las condiciones de la carretera. El vídeo está grabado de noche, en medio de una aparente tormenta; la lluvia es fuerte y la visibilidad es mínima, probablemente no alcanzando más que unas decenas de metros. En esa situación, es vital mantener una velocidad muy inferior al límite legal, sin importar cuantas ayudas tenga el coche.
Sin embargo, la velocidad del coche en el momento del accidente es de 75 mph, o 120 km/h, como se aprecia fugazmente en el vídeo; una velocidad probablemente adecuada y legal en una autopista como esta, pero sólo en condiciones ideales. Con fuerte lluvia y baja visibilidad, es simplemente ganas de buscarse problemas.
Un accidente inevitable
La causa del accidente es obvia; el coche hizo lo que se conoce como "aquaplaning": las ruedas perdieron tracción al encontrarse con una mayor masa de agua de lo que los neumáticos pudieron evacuar. El efecto depende de la velocidad a la que se impacta con la superficie mojada, y no se aprecian grandes charcos en la carretera; por lo que, a una velocidad inferior, el coche probablemente se podría haber salvado... si el conductor tuviese las manos en el volante.
Porque si el vídeo se ha hecho público es precisamente porque el conductor estaba grabando con su cámara (probablemente el móvil a juzgar por la calidad), en vez de prestar atención a la carretera.
Sobre el segundo 2 del vídeo se aprecia que el coche empieza a deslizar; en ese momento, un buen conductor podría haber reaccionado a tiempo, evitando el segundo y definitivo momento en el que las ruedas pierden tracción.
Es evidente que el conductor no supo reconocer la gravedad de la situación; el accidente hubiese ocurrido en cualquier coche, no necesariamente un Tesla. Pero para su conductor, es una excusa perfecta; en la descripción del vídeo, afirma lo siguiente:
"Amo Tesla, pero sí mi coche se estrelló en auto pilot [sic]"
Culpa totalmente al sistema, aunque probablemente si no se estrelló antes fue gracias a él. Es algo que seguirá pasando mientras los conductores no tengan claro lo que están conduciendo.