La apertura de la tercera "gigafábrica" en Shanghái, China, ha sido todo un éxito para Tesla; es la primera que abre fuera de los EEUU, pero desde luego no será la última.
Para Tesla, la estrategia para expandirse y hacer verdadera competencia a los grandes fabricantes consiste en llevar las fábricas directamente a los mercados; de esta manera, la producción y entrega de nuevos vehículos será mucho más rápida y barata que transportarlos desde los EEUU.
En China ya hemos visto que esto ha permitido a Tesla bajar incluso más el precio de su modelo más popular, el Model 3. Y en Europa se espera que se repita la historia, no solo con el Model 3 sino también con el nuevo modelo que llegará a mediados de este año, el Model Y.
Los objetivos de la fábrica de Tesla en Europa
La nueva gigafábrica de Tesla finalmente estará en Berlín, y al igual que en Shanghái, el plan de Elon Musk es que inicie la producción muy pronto. Aunque la construcción de la nueva planta de producción ni siquiera ha sido aprobada aún el gobierno alemán ni las autoridades locales, Tesla ya está haciendo planes muy concretos.
De hecho, es gracias a los documentos necesarios para la aprobación por el ministerio de medio ambiente alemán que estos planes se han hecho públicos y podemos conocerlos. Tesla quiere iniciar la producción en Berlín lo antes posible, y por eso la nueva "gigafábrica" se construirá en diversas fáses; cuando termine la primera, ya será posible producir nuevos coches en tiempo récord.
Tesla planea iniciar la construcción de la primera fase en los próximos seis meses; y poco más de un año después, esta porción de la fábrica ya sería capaz de trabajar a pleno rendimiento, produciendo 150.000 vehículos a partir de julio de 2021. Eso sería mucho más de las unidades que está vendiendo ahora, así que son cifras muy optimistas.
La nueva fábrica se centrará en producir dos modelos: el Model Y y el Model 3; el segundo no necesita presentación, teniendo en cuenta que ya está ocupando los primeros puestos de ventas en algunos países.
El Model Y es el más interesante. El primer SUV de Tesla se parece mucho a un Model 3 más alto y espacioso, aunque la compañía afirma que hay mucho trabajo de ingeniería detrás. Es muy probable que el Model Y sea muy solicitado, teniendo en cuenta el gran éxito de los SUVs en el mercado actual.
El gran ausente es el Model S, por supuesto; el sedán es más caro y pertenece a un sector a la baja. Mientras esperamos una renovación, o una nueva versión más deportiva, todo apunta a que Tesla se centrará en el Model Y y el Model 3, más baratos y que apelan más al comprador medio.