Mayo Clinic y Nuro han recibido permiso de las autoridades para realizar transportes de paquetería por vías públicas usando coches sin conductor; en medio de la cuarentena, pueden ser la mejor opción para conseguir productos de primera necesidad sin poner en peligro a nadie.
Las calles de las principales ciudades occidentales están prácticamente vacías, especialmente comparado con el tráfico que suelen tener; es la consecuencia del confinamiento ordenado por muchos gobiernos para evitar la propagación del coronavirus.
Es chocante ver nuestras ciudades vacías, y es inevitable pensar en las consecuencias económicas que tendrá; pero en el sector de los coches autónomos, ya hay quien ha visto una oportunidad de oro.
Coches sin conductor, ¿ideales para la cuarentena?
Dos startups estadounidenses han declarado las mismas intenciones esta misma semana: aprovechar que las carreteras no están tan llenas de coches para realizar pruebas reales con vehículos autónomos.
Se proponen dos objetivos: tanto acelerar el desarrollo de esta tecnología con datos obtenidos de carreteras públicas, como demostrar el potencial que tiene para situaciones como la que estamos viviendo.
La que ya ha puesto sus coches autónomos en la calle es Mayo Clinic, que está usando cuatro vehículos en Jacksonville, Florida, para transportar muestras de prueba del coronavirus desde el lugar en el que se toman hasta los laboratorios.
Las muestras se cargan en los puestos temporales instalados para realizar pruebas a ciudadanos que crean tener los síntomas del COVID-19. Entonces el vehículo es capaz de realizar el viaje por si solo, transportando las muestras hasta el laboratorio donde se realizan los test.
Es una distancia muy corta, pero esto es más una prueba de concepto que demuestra que este tipo de usos son posibles y hacen innecesario tener a un conductor haciendo el recorrido y, potencialmente, contagiándose.
Mayo Clinic está usando vehículos del fabricante francés Navya, que usan Inteligencia Artificial y aprendizaje automático para aprenderse el recorrido y los obstáculos que se puedan encontrar. Están pensados para el transporte de personas y material, como si fueran "mini-buses".
Envíos a domicilio automatizados
En cambio, el proyecto de la startup californiana Nuro es algo más ambicioso; acaba de recibir permiso para poner a prueba sus nuevos R2, vehículos autónomos diseñados para el transporte y la entrega de paquetes.
Estos pequeños "huevos" tienen una zona de carga interna, sin contar ni siquiera con un habitáculo para un posible conductor; fueron diseñados desde el principio para que circulasen por si solos, no son coches normales adaptados.
Es por eso que probar este tipo de vehículos hasta ahora ha sido difícil, porque los gobiernos locales se han negado a dar permiso; las pruebas de coches autónomos, como las de Waymo o Uber, normalmente se realizan con un empleado a bordo que puede tomar el control si algo sale mal. Nuro ya recibió permiso para probar estos vehículos, y ahora los podrá usar en el estado de California para las pruebas reales.
Por eso la situación actual, con menos coches y gente en la calle, es perfecta para realizar pruebas más "arriesgadas". Las pruebas que Nuro realizará se centrarán en cómo estos vehículos circulan por los vecindarios e interactúan con los clientes.
El R2 está pensado principalmente para la entrega de paquetes, como bolsas de la compra, por lo que es ideal ahora que se pide a la gente que no salga de casa. Gracias al acuerdo de Nuro con tiendas locales, empezará a ofrecer envíos a domicilio con estos coches. Nuro afirma que las pruebas también servirán para enseñar a las comunidades a interactuar con estos vehículos.