El potencial de los Tesla en Autopilot es cada vez mayor, gracias a las últimas actualizaciones lanzadas a lo largo del 2020; por ejemplo, estos coches ya son capaces de tomar rotondas de manera convincente.
Las rotondas son el mayor enemigo de muchos conductores, así que no es de extrañar que sean difíciles de comprender para los coches autónomos; claro, que el principal motivo es una falta de datos.
Y es que Tesla, al igual que muchos otros fabricantes, es de los EEUU, donde las rotondas no son muy comunes; hubo intentos de adoptarlas en algunas ciudades, pero fueron infructuosos por el rechazo de los conductores, que prefieren los tradicionales (si bien poco efectivos) cruces.
Un Tesla en Autopilot en una rotonda
El problema es que estos sistemas autónomos son mejores cuantos más datos tengan; en otras palabras, cuanto más los usemos. Es por eso que hasta ahora, las rotondas suponían un problema para los Tesla, que han sido conducidos principalmente en los EEUU; algo que está cambiando conforme se venden más unidades en Europa.
Es gracias a esto que el Autopilot ya está a un nivel bastante decente en lo que respecta a las rotondas, como ha demostrado el canal de Youtube Tesla Driver. Las pruebas se han realizado con un Model 3 con la actualización 2020.16.3. Entre las novedades se encuentra la posibilidad de marcar una ruta en el navegador y que el coche la haga de manera automática; y por lo tanto, eso implica tomar algunas rotondas.
La gran dificultad para el Autopilot consiste en ir en contra de sus propias medidas de seguridad. Cuando tomamos una curva muy cerrada, el sistema siempre prefiere que el usuario tome el control del coche; un problema cuando estás haciendo una rotonda y llega a la conclusión de que no puede girar tanto el coche.
Aún queda que mejorar
En la prueba, el Model 3 pudo tomar las rotondas muy bien, hasta el punto de que alguien que lo viese probablemente no se daría cuenta de que está siendo conducido de manera semi-autónoma.
Donde más falla es cuando detecta las salidas, y tiende a cogerlas en vez de continuar la rotonda. Al final, el propietario de este Tesla encontró un 'truco' para que el Model 3 aceptase que está en una rotonda: indicar un cambio de carril hacia el interior de la rotonda, para evitar que cogiese las salidas del lado contrario.
El experimento con la rotonda empieza en el minuto 10 de este vídeo:
El vídeo ha sido grabado en el Reino Unido, así que hay que tener en cuenta que en este caso, las salidas de la rotonda están a la izquierda y lo que quería era mantener el coche a la derecha; sería interesante ver cómo se comporta en rotondas europeas donde se conduzca por la derecha.