Las misiones de exploración de Marte con vehículos de exploración rover son uno de los platos fuertes de la NASA. Los casi 50 años que separan el primer lanzamiento con el acaecido este jueves en el Centro Espacial Kennedy, han servido para estudiar y analizar al planeta rojo como uno de los próximos destinos espaciales para la humanidad.
El éxito de los nueve años del rover Curiosity en la superficie marciana no ha hecho sino alimentar las expectativas del recién lanzado Perseverance. Este último aterrizará en un cráter donde se han encontrado evidencias de haber sido una zona inundada por agua. Del mismo modo, tendrá una elevada carga de trabajo en tareas de investigación geológica y atmosférica. Aunque para esto último Emiratos Árabes Unidos acaban de lanzar un satélite meteorológico.
Lo que es menos conocido es que empresas e instituciones españolas han trabajo en el desarrollo de algunos componentes importantes para los rover Curiosity y Perseverance y la nave científica InSight . Elementos que permiten el correcto desempeño de las misiones y se posicionan como claves en la investigación espacial.
España en el Perseverance
El último lanzamiento de la NASA es uno de los más importantes pues servirá como avanzadilla a las futuras exploraciones humanas que pretende liderar Elon Musk en los próximos años. El Perseverance es un vehículo de exploración que viajará por la superficie de Marte con componentes españoles instalados a bordo.
Según un esquema de la propia Agencia Espacial de Estados Unidos, España es la responsable de una estación meteorológica alimentada por sensores instalados en la parte alta del Perseverance. El estudio de la geología mediante la recogida de muestras -que luego regresarán a la Tierra- es junto con la caracterización del entorno atmosférico donde el rover se hará más fuerte. Y justo en esto último es donde España entra en acción.
El Perseverance equipa un "avanzado conjunto de instrumentos, entre los que está el MEDA (Mars Environmental Dynamics Analyzer, o analizador de la dinámica ambiental de Marte", según recoge el comunicado de prensa publicado por el Centro de Astrobiología, un centro de investigación dependiente del INTA (Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial) y del CSIC (Cosejo Superior de Investigaciones Científicas).
El MEDA será el responsable de llevar a cabo la caracterización ambiental y del polvo en superficie, "registrando todas esas magnitudes de forma ininterrumpida durante toda la duración de la misión". Los sensores españoles están instalados en la cubierta y el mástil del Perseverance y trabajarán coordinados con el resto de la instrumentación científica a bordo.
"MEDA consta de siete sensores para medir la dirección y velocidad del viento, la humedad relativa, la presión atmosférica, la radiación solar ultravioleta, infrarrojo y visible incidentes, las propiedades del polvo en suspensión, la temperatura del suelo y del aire y, además, una cámara para tomar imágenes del cielo marciano (nubes incluidas)".
Dentro del proyecto también han participado otras universidades y entidades públicas españolas. Como por ejemplo la Universidad Politécnica de Madrid, Universidad de Alcalá,Universidad Politécnica de Cataluña o Instituto de Química-Física Rocasolano, entre otras. En cuanto al sector empresarial, en el MEDA ha participado Airbus DS-Tres Cantos, ALTER Technology AVS Added Value Solutions. En el apartado internacional ha contado con participación de diferentes departamentos dependientes de la NASA y varias universidades de Estados Unidos, Italia y Finlandia.
La participación española no termina con el MEDA. El Perseverance tendrá también instalada una antena de alta ganancia construida en España. En concreto, se trata del mismo dispositivo que se envió a Marte allá por el 2012 con el rover Curiosity que actualmente sigue funcionando y proveyendo de resultados científicos importantes. El desarrollo de la antena ha sido llevado a cabo por un consorcio formado por Airbus Defense and Space y Sener.
InSight y Curiosity
El primer dispositivo de España en enviarse a Marte fue una estación meteorológica similar a MEDA enviada en el lanzamiento de hoy. En concreto, se instaló a bordo del rover Curiosity que llegó a la superficie marciana en 2012.
El Rover Environmental Monitoring Station (REMS, de sus siglas en inglés) está compuesto de sensores en el mástil, en la cubierta y en el interior del cuerpo del rover. Al igual que el MEDA, el REMS tiene la capacidad de registrar la velocidad y dirección del viento, la presión atmosférica, la humedad relativa, la temperatura del aire, la de la superficie y la radiación ultravioleta. Fue entonces el primer instrumento en medir la radiación ultravioleta en Marte.
Ya en 2018 la NASA lanzó a Marte la misión InSight y España, de igual modo que con Curiosity, también estuvo presente. Y de nuevo con una estación meteorológica a bordo. En ese caso se denominó TWINS y es la encargada, aún a día de hoy, de proporcionar datos atmosféricos a los investigadores. La plataforma InSight se desarrolló con el objetivo de conocer el subsuelo de Marte e incluyeron un sismógrafo que registra los movimientos sísmicos del planeta así como los impactos de meteoritos.