Apple ha celebrado esta semana uno de sus grandes eventos del año. Junto con un par de modelos de iPad, el Apple Watch Series 6ha sido el que ha acaparado más miradas. El que ya se erige como rey de todo el segmento wearable, acaba de incorporar una nueva función: medir la saturación de oxígeno en sangre. Pese a que no se trata del primer dispositivo que incorpora esta tecnología disponible España, sí es el primero de la marca de Cuperitno y el que se antoja más avanzado.
Con el coronavirus acechando en cada esquina, es complicado haber escapado estos ultimos meses al término saturación de oxígeno en sangre. Una medición importantísima que está sirviendo a los sanitarios en la evalucación de cada paciente y que una bajada puede significar un mal funcionamiento de los pulmones, un síntoma clave de la Covid-19.
Apple lleva incorporando sensores de salud esenciales desde que en su primera versión contaba con un medidor del ritmo cardiaco. Luego ha incorporado el detector de caídas, un electrocardiograma que ha llegado a salvar a más de una persona de dolencias graves, y por último sube su apuesta con un sensor de saturación de oxígeno.
Saturación de oxígeno en el Apple Watch
En la presentación, Apple hizo mucho hincapié en explicar cómo el sensor de saturación de oxígeno puede ayudar a las personas en su día a día. Pusieron el ejemplo de actividades físicas y también de personas mayores con algunas dolencias que pueden beneficiarse de conocer cómo evoluciona la saturación a lo largo del día con mediciones puntuales. Todo esto gracias a un nuevo sensor desarrollado por la compañía y que tiene mucho que ver con los que vemos instalados en los medidores sanitarios en cualquier centro de salud u hospital.
La saturación de oxígeno en sangre, acortado normalmente como SpO2, es el procentage de oxígeno transportado en los glóbulos rojos en la sangre desde los pulmones al resto del cuerpo. Indica, principalmente, cómo de bien -o mal, en el caso de ser baja- está oxigenada la sangre que se reparte por el cuerpo.
El sistema elegido por la empresa en el Apple Watch Series 6 pasa por el empleo de 4 grupos de LEDs que emitirán radiación en el espectro visible del verde, del rojo y también en el infrarrojo. A los que hay que añadir 4 fotodiodos emplazados en el cristal de la parte trasera del reloj que recogerán la luz y la radiación reflejada. Apple ha desarrollado una serie de algoritmos que, con esa luz reflejada, son capaces de determinar la saturación de oxígeno en sangre mientras se sitúe entre el 70 y el 100%, según indica la marca. La medición tomará exactamente 15 segundos y se almacenará en la aplicación de Salud, junto con el resto de datos.
Apple aprovechó que medio mundo estaba pendiente de su presentación para anunciar además algunos proyectos de salud que están llevando a cabo con algunas instituciones estadounidenses en los que el Apple Watch tiene especial relevancia. Por ejemplo, y además de algunos relacionados con el coronavirus, van a investigar cómo una medición de la saturación de oxígeno en sangre a lo largo del tiempo puede ayudar a manejar y controlar el asma.
¿Y cómo funciona el oxímetro sanitario?
Mientras que la forma en la que el Apple Watch realiza los electrocardiogramas difiere mucho del sistema hospitalario, la medición de oxígeno funciona de forma -casi- calcada a los oxímetros de pulso.
En el primero de los casos es menos intrusivo, basta con colocarnos el dispositivo de Apple en la muñeca y tocar la corona para que se cierre el circuito y comience la medición. En un centro de salud u hospital colocan al paciente en una camilla y lo conectan a una máquina mediante varios sensores distribuidos por todo el cuerpo.
En el segundo escenario el reloj se asemeja más a los pulsioxímetros sanitarios. Éstos últimos incorporan un par de LEDs que emiten radiación en la longitud de onda correspondiente al rojo y al infrarrojo, atravesando el cuerpo (dedos o lóbulos de las orejas, principalmente) y será recogida por un par de fotodiodos. Con la señal recibida y atendiendo a las diferentes absorciones de radiación que tiene la hemoglobina, el aparato es capaz de determinar la saturación.
Estos dispositivos profesionales se colocan a modo de pinza con los LEDs y fotodiodos separados por el cuerpo, mientras que el Apple Watch no deja de ser un reloj. Los fotodiodos del dispositivo de Apple recogerán una información diferente debido a que capta la radiación que 'rebota' de las venas y arterias y no la que traspasa las venas.
Como ya es costumbre, en cualquier caso Apple no quiere sustituir a los médicos y siempre recomiendan acudir a un centro de salud si tenemos sospechas de alguna dolencia, puesto que el Apple Watch no es un dispositivo hospitalario, aunque sea cada vez más avanzado.