El teletrabajo ha recibido el empujón definitivo con los diferentes confinamientos obligatorios en todo el mundo. En España, desde marzo y durante los últimos meses, se ha vivido una auténtica revolución. Empleos que nunca se habían acogido a este sistema han tenido que enfrentarse a una realidad totalmente nueva e inexplorada.
Los trabajos clásicos de estar sentado frente a un ordenador han sido los más sencillos de adaptar; incluso es posible que antes del confinamiento ya existieran algunos empleados trabajando en remoto. Pero hay otros que nunca podríamos haber imaginado que también se pueden realizar dese la comodidad del hogar.
Si a las posibilidades casi 'extremas' de teletrabajo unimos la elevada carga que están soportando algunos centros logísticos debido al comercio online y la imposibilidad de detener la obra civil. El resultado de la ecuación nos da conductores de máquinas elevadoras haciendo su trabajo en remoto u operarios de maquinaria pesada haciendo lo propio desde sus casas.
El 'toro' en casa
El sistema ha sido propuesto por Elliot Katz, cofundador de la compañía Phantom Auto, al darse cuenta de que las cadenas de logística lo son también de transmisión del coronavirus. Menos empleados en estos grandes centros de almacenaje y distribución se traduce en menos potenciales contagios.
Podríamos pensar que los únicos en irse a sus casas han sido los encargados del 'papeleo' o de las gestiones administrativas. Pero nada más lejos. Phantom Auto proporciona la tecnología necesaria para que los conductores de carretillas elevadoras puedan realizar el trabajo desde casa. "Tenemos clientes que hoy por hoy están operando las carretillas elevadoras de forma totalmente remota", ha declarado Katz a BBC. Un sistema que, asegura, ha extendido en los últimos meses en almacenes de Estados Unidos y Europa.
Algunos centros logísticos donde se está aplicando la tecnología de Phantom Auto cuentan con zonas exclusivas de carretillas elevadoras manejadas a distancia. De esta forma no se mezclan con el resto de personal que está trabajando en físico y no pone en riesgo a personas.
Katz también apunta a que todos sus sistemas instalados en la carretilla cuentan con micrófonos para que el operador pueda escuchar los avisos de sus compañeros. "Si alguien está detrás de una carretilla elevadora [manejada a distancia] y dice 'cuidado, estás a punto de golpearme', el conductor lo puede escuchar del mismo modo que si estuviera trabajando físicamente".
Y maquinaria pesada
Una vez se rompe la barrera del teletrabajo, nos encontramos con una cantidad de posibilidades de que tiende al infinto. Si ya manejar una carretilla elevadora desde casa a kilómetros de distancia ya nos parecía algo de ciencia ficción, Teleo, una compañía estadounidense creada por un extrabajador de Lyft, ya está trabajando en los siguientes pasos.
Su idea es adaptar cualquier tipo de maquinaria para que pueda manejarse a distancia. "Teleo convierte tu flota [de maquinaria] existente en robots controlados en remoto. Los operadores controlan las máquinas a millas de distancia y pueden cambiar entre máquinas de forma instantánea", según reza la página web.
Este último sistema, como hemos podido leer, pone a disposición de un único operario varios modelos de maquinaria. Esto permite trabajos mucho más flexibles y un ahorro de costes a las empresas importante.
Al igual que Phantom Auto, también basan gran parte de sus propuestas en la mejora de la seguridad en el entorno laboral. Una trabajador que no está en la obra no puede sufrir ningún tipo de accidente relacionado al mismo tiempo que cuentan con medidas de seguridad para la gente que sí está físicamente en la obra.
El funcionamiento de la adaptación es más sencillo de lo que pueda parecer, al menos una vez que la compañía ya tiene todo lo necesario. "Modernizamos el equipo pesado existente con una caja que permite el control del equipo mediante teleoperaciones", apuntan.
El siguiente paso es montar una infraestructura de internet de alta velocidad que sea capaz de transportar todos los datos con la máxima celeridad, con el menos retardo posible y de forma estable. Seguro que el 5G, con sus especificaciones técnicas de ancho de banda y baja latencia, es un excelente aliado para estas aplicaciones. Teleo también monta la infraestructura necesaria para que los operarios trabajaban. "Puede ser en las oficinas de la empresa [encargada de la maquinaria] o bien cerca de donde los trabajadores vivan", apunta la compañía.
Como un videojuego
Los controles, tal y como se puede ver en las fotografías, no distan mucho de los que podemos encontrar en las estanterías de periféricos de cualquier tienda de videojuegos. Un volante, unos pedales y las palancas necesarias para controlar todos los controladores de la cabina de la maquinaria. A esto se añade diversos tipos de monitores que serán los 'ojos' del trabajador a distancia dentro del almacén logístico.
La seguridad, para ambas compañías, también es un punto muy importante. Si un atacante puede hackear el sistema podría emplear la maquinaria para hacer el mal. Por ejemplo, encriptando las comunicaciones entre el teleoperador y el vehículo.