El ejército estadounidense es uno de los que más apuestan por los drones de todo el mundo. A diferencia de España, donde el número de drones es mucho menor, en el país norteamericado rara es la semana donde no se dan a conocer planes sobre su uso en las más variadas de las situaciones.
El siguiente paso son los ejambres de drones, unas bandadas de pequeños dispositivos volantes que ya se han probado en algunas aplicaciones -como en espectáculos- y varios países ya están inmersos en desarrollos para su uso en el entorno militar. Desde enjambres suicidas con inteligencia artificial a otros dedicados a recabar información para los servicios de inteligencia.
El último proyecto, salido desde la Army de Estados Unidos (el equivalente al Ejército de Tierra en España), busca crear globos que puedan volar hasta la estratosfera con enjambres de drones en su interior. Una forma de viajar largas distancias sin la necesidad de gastar combustible y, además, pasar desapercibido a los sistemas de detección de las líneas de defensa enemigas.
Globos llenos de drones
El proyecto ha sido publicado dentro del portal principal de contrataciones del gobierno de Estados Unidos como un desarrollo que se encuentra en las primeras etapas de investigación. Y no es un formato realmente nuevo. El ejército del país ya está experimentando con algunos proyectos de globos en la estratosfera con altitudes de vuelo que los situan entre los 8.000 y los 20.000 metros de altura.
Algo así como una 'capa' intermedia de infraestructura de telecomunicaciones que se situara entre las bases en tierra firme, los aviones de inteligencia y los satélites espaciales. Las pruebas más recientes conocidas de este proyecto han sido llevadas a cabo en un campo de experimentación de misiles en el estado de Nuevo México, según recoge Defense News.
"Los globos podrían proporcionar alguna capacidad más allá de la línea de visión", apuntó Brent Fraser, jefe de la división de desarrollo de conceptos en el Centro de Excelencia de Defensa Espacial y de Misiles de la Army. "Podrán proporcionar la capacidad de detección de objetivos en las áreas más alejadas del enemigo". Además de reforzar y complementar los sistemas de detección existentes. Esto es, servir de apoyo para las actuales líneas de vigilancia proporcionando una nueva fuente de información donde hasta ahora solo llegaban imágenes satelitales.
La siguiente derivada a un 'inocente' globo de inteligencia es la capacidad de cargarlos con ejambres de drones. En la información que la propia Army ha publicado se muestran globos con la propiedad de lanzar enjambres de drones o una serie de sensores dedicados a recabar información.
No se puede escapar la oportunidad de conseguir internar globos más allá de las líneas enemigas. Menos todavía si esos mismos globos son capaces de acarrear drones en sus bodegas y poner a disposición del ejército un poder de ataque en suelo enemigo sin precedentes.
Al ser un proyecto en pleno desarrollo, no se conocen detalles sobre cómo finalmente se llevará a cabo ni si quedará en unas meras intenciones. Pero lo que sí ha trascendido en varias ocasiones es el objetivo de desarollar drones capaces de ser lanzados desde diferentes plataformas. Como por ejemplo, desde aviones tripulados y no tripulados o desde misiles hipersónicos. Todos ellos concapacidad de trabajar como un ejambre para obtener información y, dada la situación, servir como munición. Por lo que no sería extraño que los globos también entraran en este selecto club.
Los globos en la estratosfera se pueden considerar casi furtivo. Al estar tan altos y no emitir calor, poseen firmas de radar relativamente pequeñas sumado a las diferentes protecciones en forma de reflectores para hacerlos todavía más invisibles.
Otro de los puntos fuertes de esta tecnología es que son notablemente más económicos que la construcción y el posterior lanzamiento de satélites de órbita baja al tiempo que no se pone en peligro ningún avión tripulado.
Drones suicida
Además de emplear drones en espectáculos audiovisuales, China también trabaja en algunos proyectos de enjambres suicidas. A diferencia del desarrollo que acabamos de conocer de Estados Unidos, el país oriental lanza sus drones desde camiones. En la práctica no son más que misiles con algunas capacidades extras como cámaras o la capacidad de mantenerse 'merodeando' hasta que consigue identificar al objetivo.
Un concepto muy similar a los drones suicidas iraelíes que se enmarcan dentro de una gama amplísima. Desde unos tan discretos que se pueden guardar en una mochila a otros con varias horas de autonomía y cargas explosivas tan fuertes como para destuir un edificio.
Si los drones se han convertido en una de las principales herramientas para ejércitos de todo el mundo, los drones suicida harán lo propio en con el apartado de ataque. Su principal baza es que son capaces de almacenarse en cualquier lugar -Rusia los equipará en helicópteros- y la instalación de un software de inteligencia artificial que les permite atacar en el momento justo.