Cuando hablamos de casa conectada, seguro que nos aparecen nombres en la cabeza de las primeras espadas del sector. Pero ¿puede una cadena de supermercados con los más grandes? Justamente ese es el objetivo de Lidl. La cadena de alimentación alemana ya tiene una amplísima variedad de dispositivos a la venta en España con los que dotar de 'inteligencia' a nuestro hogar.
Todo el ecosistema Smart Home (como lo llama Lidl) se encuentra totalmente accesible desde la página web y se adapta a todos y cada uno de los hogares. Tan solo hace falta una conexión a Internet doméstica y muy pocos euros para las configuraciones más básicas.
De esta forma, Lidl sigue demostrando que puede ir mucho más allá de un 'simple' supermercado de alimentación y productos básicos del hogar. Al igual que lo ha hecho con su particular versión de la Thermomix, que reúne a cientos de personas en las puertas de los supermercados cada vez que se pone a la venta, su propuesta de casa conectada entra en un mercado en pleno auge y con mucho potencial de crecimiento.
¿Qué tiene Lidl?
Antes de comprar los dispositivos, hay que aclarar que funcionan mediante el estándar Zigbee 3.0. Esto es, una de los protocolos de conectividad de domótica más importantes y más extendidos del mundo gracias a las cuales los usuarios pueden disfrutar de una cantidad de dispositivos que tiende al infinito.
Desde altavoces con asistentes virtuales a termostatos, pasando por todo tipo de luces o pequeños electrodomésticos. Esos tres tipos son solo una minúscula muestra de todo lo que rodea a Zigbee. Una de las diferencias respecto a otras soluciones es que necesita de una pequeña centralita que se convierte en el nexo. Lidl la vende en su página web por 24.99 euros. Un dispositivo obligatorio para configurar el resto.
Una vez aclarado este tema, hay que pasar a la adquisición de los diferentes tipos de dispositivos que queremos comprar.
Además de la centralita, Lidl tiene un calefactor conectado, un sensor de movimiento, una regleta, un surtido de bombillas, una cinta adhesiva de LEDs, enchufe inteligente y un sensor de movimiento de pared para saber cuándo se abre o se cierra una ventana o puerta.
Como se puede comprobar, un surtido más que suficiente de la marca de Lidl que se puede completar con cualquiera que cuente con el protocolo Zigbee 3.0. O, si ya contamos con uno, no necesitaremos de la centralita y podremos integrar los dispositivos independientes directamente.
Primeros pasos
El paquete que nos ha hecho llegar Lidl para realizar la prueba se compone de un total de tres bombillas inteligentes con control de tonalidad, brillo y color (59 euros incluida la centralita); una centralita Zigbee, una regleta de enchufes (24.99 euros) y un detector de movimiento (14.99 euros).
La configuración es realmente sencilla. En pocos minutos -no más de 5- tenía todos los dispositivos colocados en sus respectivas posiciones para comenzar al 'juego' con la centralita. Esta última se conecta directamente a la corriente eléctrica y al router de casa mediante un cable LAN estándar.
Conectamos la central domótica con Zigbee e instalamos la aplicación Lidl Home en nuestro smartphone (está disponible tanto para Android como para iOS). Ahora ya sí que estamos listos.
Configurando todo
Es quizá la parte más compleja de todo el proceso. Y no porque Lidl ponga difícil integrar todo su ecosistema. La cantidad de opciones que se pueden llegar a configurar y ajustar puede llegar a abrumar a alguien que nunca se ha enfrentado a esto. Si somos de esos que buscan tener todo configurado al milímetro habrá que echarle un rato.
Pero comencemos por el principio. Una vez instalada la app, la abrimos y añadimos la central de domótica una vez esté conectada a la corriente y a Internet. El emparejamiento es casi instantáneo y la aplicación reconoce al dispositivo sin mayores problemas.
Ahora queda ir añadiendo uno a uno todos los elementos de la casa conectada. El pack se acompaña de unas instrucciones que debemos seguir al pie de la letra para no tener que poner los dispositivos en "modo emparejamiento" de forma manual y que todo vaya más rápido.
Una de las recomendaciones es la de ir añadiendo uno a uno los elementos pues, si tenemos varios del mismo tipo, puede llegar a ser un pequeño caos tecnológico de nombres y luces parpadeantes. Nada que no se solucione en 3 minutos.
Una vez tengamos todo perfectamente sincronizado queda la parte de crear rutinas o temporizadores. El sensor de movimiento, a pesar de lo que pueda parecer en un primer momento, da mucho juego a la hora del encendido de las luces.
Personalmente lo he usado justo para eso. Cuando paso delante del sensor desde y hasta una hora predeterminadas, la luz de la habitación se enciende y me da la 'bienvenida'. También se puede emplear para registrar movimientos y saber cuándo alguien ha pasado por delante. Notificaciones al smartphone incluidas.
Las bombillas con las que contamos permiten elegir la tonalidad de blancos para adaptarse a nuestras necesidades e incorporan todo el abanico de colores imaginable. Incluso un modo discoteca que cambiará la luz al ritmo de la música. Existen otras que solo emiten diferentes tonalidades de luz blanca.
Por otro lado, la regleta es a la que menos partido 'inteligente' he sacado. Como regleta normal funciona extraordinariamente bien y cuenta con un total de tres enchufes estándar y otros tantos puertos USB. Desde la aplicación tan solo se pueden apagar y encender los enchufes, mientras que los USB estarán siempre encendidos mientras la regleta tenga corriente.
¿Me lo compro?
Si queremos iniciarnos en esto de las casas conectadas, Lidl lo pone más fácil que nunca. La central domótica, como elemento base, tiene un precio de 24.99 euros y, a partir de ese punto, podemos añadir cualquier dispositivo y combinación de dispositivos que se nos ocurra.
El funcionamiento de todo el ecosistema es extraordinario no dando nunca un solo problema. También destacamos la facilidad con la que se sincroniza y emparejan todos los elementos de la casa conectada. Sin olvidar que tiene soporte para asistentes virtuales como Google Assistant o Alexa, un punto muy importante si ya tenemos montado nuestro sistema preferido en casa.
Y, cómo no, el uso de estándar de comunicaciones Zigbee 3.0 es una apuesta segura gracias a que muchas marcas de todo el mundo optan por esta plataforma para desarrollar sus soluciones. Los productos de Lidl Smart Home, como casi todo lo que hace la compañía, son compra maestra.