David Calvo (Zoom): "Nuestro éxito se da porque somos fáciles de utilizar y fiables"
Zoom ha resonado en todo el mundo a raíz del coronavirus. Hablamos con David Calvo, responsable de ventas para el sur de Europa, sobre los planes y futuro de la empresa.
13 junio, 2021 02:10Noticias relacionadas
Pocos se imaginaban en 2019 lo que iba a ocurrir a partir de marzo de 2020. La pandemia del coronavirus llegó para cambiar la sociedad a todos los niveles. España fue uno de los países en los que la digitalización logró que mucha labor de oficinas no parase y el teletrabajo se adoptó con fuerza y rapidez.
Aplicaciones como Google Meet, Microsoft Teams y sobre todo Zoom han vivido una inesperada época dorada en esta pandemia. Las videollamadas han transformado nuestra forma de relacionarnos y se han abrazado como una interacción más normal en el día a día. Sin embargo, conforme avanza el ritmo de vacunación la normalidad vuelve y ¿el fenómeno de hacer un Zoom puede llegar a diluirse?
Para conocer cómo ha vivido Zoom, la aplicación principalmente beneficiada por la pandemia, entrevistamos a David Calvo, jefe de ventas para el sur de Europa de la compañía, así como para saber qué futuro esperar de la plataforma de cara al final de la pandemia.
Zoom ha logrado gran éxito con la pandemia. La propia frase 'hacer un Zoom' se ha asentado ¿Cómo ha cambiado la compañía?
Este año pasado ha sido un año de crecimiento exponencial para nosotros, pero es un crecimiento que desde el principio (cuando se creó Zoom) en 2011 ya se venía conociendo. Zoom se creó como un entorno, una herramienta corporativa y una solución para empresas que necesitaban plataformas de comunicaciones unificadas y es este año pasado cuando de repente se nos abren las puertas a un mundo que no conocíamos. A pesar de que el año pasado fue un 'acelerador' para nosotros en cuanto a reconocimiento de marca, el mercado corporativo siempre ha sido (y seguirá siendo) nuestro foco principal.
Respecto a cifras; se esperaba en el año pasado unos ingresos de 800 millones de dólares, y se terminó el año con 2.600 millones de dólares. Las proyecciones de cifras para este año fiscal se incrementaron hasta 3.700 millones de dólares. Nosotros, a pesar de que sabemos que el mundo vuelve un poco a esa 'nueva normalidad', esperamos tener esas soluciones para aquellas empresas y organizaciones que las busquen y que sigan necesitando unos servicios no solo virtuales, sino híbridos.
¿Cómo ha sido la transición de la etapa prepandemia a postpandemia?
En general, no hemos cambiado, al menos en lo que se refiere al ADN de la empresa. Nuestro eslogan, Delivering Happiness (entregando felicidad) es algo que vivimos y respiramos - aunque a veces puede parecer un simple recurso de marketing- es realmente lo que hacemos en nuestro día a día. Hemos seguido trabajando y lo vamos a seguir haciendo exactamente igual ofreciendo nuestro tiempo y nuestros servicios a todo tipo de organizaciones repartidas por todo el mundo. Zoom no cambia.
¿Cuál es la clave del éxito de Zoom?
Creo que la clave principal ha sido que el mundo se ha volcado de la noche a la mañana a ser totalmente remoto y por ello se ha necesitado una plataforma que fuera sencilla de utilizar, que sea fiable y que sea escalable.
Si tú eres un hospital o una organización que se dedique a hacer -por ejemplo- clases de algún tipo, necesitas una plataforma que sea sencilla de usar y a la que puedas dedicarle todo tu foco a tu tarea principal y no estar pendiente de si tienes conexión, del 'no se oye', etc. El punto principal ha sido la simplicidad. Eso ha hecho que a pesar de haber muchas alternativas en el mundo, éste se volcara en su gran mayoría a Zoom.
Las videollamadas han llegado para quedarse, ¿diría que la relación entre las personas y las videollamadas ha cambiado en todo este tiempo?
Nuestro foco siempre ha sido el vídeo y todo lo referente al vídeo, no ha cambiado nada. Lo que hemos intentado transmitir al mundo en general es el hecho de que hacer una videollamada tenga que ser natural, sencilla y lo más parecido posible a estar físicamente en persona.
Como decía, y al hilo de la simplicidad, la idea es tener siempre las herramientas lo más accesibles posibles. [...] Lo que sí que hacemos es intentar llevar esa simplicidad al hecho de que al usar una herramienta segura, fiable y sencilla no tengamos que preocuparnos por nada más que mirarnos a la cara y sentir como si estuviéramos prácticamente en el mismo sitio.
Zoom no ha parado de lanzar funciones, ¿cuáles son las que cree clave para diferenciarse de la competencia?
Nuestro desarrollo de funcionalidades no es tanto para distanciarnos de los competidores sino para entregar a nuestros clientes y a nuestra industria lo que necesitan. En ese sentido, hemos ido lanzando servicios que luego la industria ha ido incorporando y hay veces que ha habido funcionalidades que nosotros no teníamos y que hemos ido incorporando.
Nuestro foco son los clientes, y sin ir más lejos muchas de estas funcionalidades (como la evolución de los servicios de Zoom Room de los que hablásteis en OMICRONO) han nacido del feedback que hemos escuchado de nuestros clientes y que hemos implementado. En el caso de Zoom Rooms, hemos reimaginado ese servicio que ya existía, pero las funciones Zoom Apps como Zoom Events o el marketplace de aplicaciones son en realidad necesidades que han ido surgiendo de una industria particular o de un cliente particular en algunas ocasiones.
Hablando de Zoom Events. Tengo la sensación de que llega tarde. Creo que es una función que en fases intermedias de la pandemia hubiera sido ideal, pero llega como decimos en un momento suave para la pandemia, cuando se están ya recuperando poco a poco los eventos presenciales en el mundo, ¿puede Zoom Events competir contra estos eventos?
La fiabilidad y sencillez de Zoom se consiguen a través de una fase de desarrollo muy importante. Al lanzar una función de la noche a la mañana pones en riesgo la calidad de la experiencia del usuario, la fiabilidad y la seguridad y por eso en ese sentido cualquiera hubiera deseado tener Zoom Events en marzo o abril del año pasado.
Pero hemos visto que las herramientas que ya teníamos han permitido que los eventos sigan adelante; sin ir más lejos, la Gala de los Goya de este año ha sido una gala puramente virtual con los nominados conectándose desde casa usando Zoom para reunirse.
A pesar de que la herramienta no haya estado disponible a inicios del pasado confinamiento, durante todo este tiempo se ha estado desarrollando y trabajando en ello para compaginar algunas necesidades que a día de hoy eran más complicadas (producción externa, herramientas internas...). Además, pensando en ese nuevo futuro híbrido. Realmente no llega tarde; llega en el momento en el que tiene que llegar, sobre todo ahora que pasamos a esa 'nueva normalidad'.
Respecto a la pregunta de si presenciales o no presenciales, los modelos de Zoom siempre han sido híbridos. Si observamos esa suite de aplicaciones de Zoom, como las salas de conferencia, cómo nos integramos con equipos de vídeo tipo H323 de terceros... Eso ya existía y reside activamente en el ya mencionado core.
La idea con Zoom Events es que este modelo siga siendo el mismo. Al final, Events es una especie de marketplace donde integramos también la plataforma de OnZooms; es un entorno híbrido y es realmente por lo que se apuesta.
Zoom no tiene otras aplicaciones de productividad. ¿Es posible competir contra Google o Microsoft sin ellas?
En realidad, cuando pensamos en las necesidades que tiene un cliente, ya existen aplicaciones de productividad. Nosotros no tratamos de reinventar la rueda en todo aquello que no es nuestro core, el cual son las comunicaciones basadas en vídeo. En todo lo demás, nosotros nos integramos (de forma a veces casi nativa) con servicios de productividad, como Sharepoint, Microsoft OneDrive, Dropbox a través del entorno del marketplace.
Este es, al final, una especie de App Store; el usuario, ya sea final o administrador, podrá con un click instalar esas aplicaciones de forma que ya integramos ese entorno puramente de comunicaciones unificadas que necesitamos para nuestro día a día con esos entornos adicionales. Es el caso de Microsoft Office 365, para agendar reuniones directamente desde el calendario directamente desde un botón. Que además, por cierto, lo estamos mejorando; pretendemos incluir esa integración en directo en la reunión en las Zoom Apps para que se puedan aprovechar en dichas reuniones.
Entonces hablamos más de integrar que de competir...
Hacemos hincapié en el entorno de desarrolladores de Zoom. La app ha tenido siempre ese entorno abierto donde, bien sea a través de nuestras APIs o bien mediante nuestros entornos de SDK, los desarrolladores puedan integrar nuestro entorno nativo de Zoom con un entorno aplicativo.
Ahora con el lanzamiento de nuestro nuevo vídeo SDK, tenemos esa opción para que aquellos desarrolladores que quieran desarrollar un aplicativo para luego comercializarlo y necesiten servicios de vídeo, en lugar de tener que desarrollar eso desde cero, puedan usar ese SDK de Zoom para ese aplicativo específico.
Existe software dedicado que permite realizar videollamadas sin tener que instalar una aplicación: ¿cómo busca competir Zoom con ellas?
Nosotros tenemos un modelo de negocio muy claro. Vendemos servicios, licencias, software, y así es como monetizamos y como sobrevivimos como empresa. Debemos destacar que no vendemos datos a terceros, que no nos lucramos de hacer un uso indebido de esos datos personales, y por eso es muy importante el tener muy claro lo siguiente: cuando alguien ofrece algo de forma gratuita, analizar el por qué eso es gratuito y cómo se están monetizando nuestros datos.
Usamos un modelo freemium, en el que un usuario puede usar Zoom gratuitamente con limitaciones que después eliminar mediante opciones para incrementar sus mejoras y empezar a pagar. Para nosotros es una especie de 'inversión' en marketing pero como decimos no vendemos datos a terceros y además tenemos una página de política de privacidad transparente y con lenguaje simple.
Hablemos del concepto 'fatiga de Zoom'. ¿Estamos hartos de las videollamadas?¿Teme Zoom que se acaben rechazando y que se perciban como algo negativo?
A veces tendemos como seres humanos irnos a un extremo. Y sobre todo el hecho de trabajar tu vida desde casa, donde no tienes esas barreras entre lo personal y lo profesional, pues hace que sea más difícil el separar y el saber decir que 'no' a veces. Por eso, nosotros somos los primeros que incentivamos a nuestros empleados internamente y a nuestros clientes con campañas de concienciación.
Una de ellas es la que hemos estado llevando a cabo los últimos meses: 'trabaja menos pero trabaja mejor'. Al final, el hecho de estructurar las reuniones con una agenda clara, sabiendo quién está, de lo que se va a tratar, cuáles son las expectativas que tienen de ti como persona profesional... Si una reunión no está bien estructurada pues puedes decir que no.
Estas formas, junto a otras como la de no celebrar reuniones internas los miércoles, sirven para incentivar el no tener que estar 15 horas al día pendientes del vídeo pese a que tengamos herramientas de vídeo dedicadas. Hay cosas que se pueden hacer con una simple llamada de teléfono en un minuto en vez de estar media hora en una reunión virtual.
Cuando entremos en la normalidad absoluta, ¿cómo afrontará Zoom esas fases finales de la pandemia en la que la gente lo último que querrá será hacer videollamadas?
David: En el mundo corporativo va a seguir existiendo esa necesidad de tener un servicio de comunicaciones unificadas, de mensajería instantánea, de chat, etcétera. Esas son cosas que no han cambiado; Zoom, en este sentido, va a seguir estando ahí. En el campo más personal o individual, un estudio realizado por Zoom refleja el uso o cómo será el futuro en determinadas categorías (eventos, deporte, etcétera).
Curiosamente, hay casi un 65% de encuestados que responde que viendo las ventajas del teletrabajo pero sin el contexto de una pandemia estiman que puedan seguir haciendo esa vida de forma híbrida, tanto física como virtualmente. Esas cifras son bastante prometedoras porque, como decimos, el vídeo y el teletrabajo híbrido nos abre unas ventanas que hasta ahora en muchos casos eran impensables, porque o bien no había tecnología, no existía o porque no hemos tenido exposición a ella.
Esa es la finalidad y el cómo nosotros previsualizamos ese futuro en el que el mundo va a ser híbrido, no va a ser puramente virtual. Es en ese modelo híbrido en el que confiamos, como digo viendo estudios que se han hecho y que los analistas corroboran.
El vídeo y el teletrabajo híbrido nos abre unas ventanas que hasta ahora en muchos casos eran impensables.
¿Cómo se ha comportado el mercado español respecto a la aplicación?
Nosotros no llegamos a desglosar cifras de uso ni de facturación por países. Lo que sí tenemos son unas cifras de los comienzos de la pandemia del año pasado (que son públicas). El año pasado, de finales de diciembre de 2019 a enero de 2020 existían unos 10 millones de participantes diarios. Se convirtieron en 300 millones de participantes diarios a finales de abril.
Las cifras de España ya están un poco atrás y no son muy relevantes, pero pasamos a tener un incremento de x74 de usuarios gratuitos y x4 de empresas con más de 10 empleados. Sin embargo, es importante destacar el uso que ha tenido Zoom en diferentes verticales con casos de uso público, como Cuatrecasas, el despacho de abogados que de la noche a la mañana pudo seguir haciendo su trabajo de forma efectiva desde sus casas porque ya llevaban usando Zoom varios meses antes de la pandemia.