El 6 de mayo del año 1937 tuvo lugar el conocido como principio del fin de la era de los dirigibles: la caída del dirigible LZ 129 Hindenburg. Un portento tecnológico que se estrelló en la base militar de Lakehurst de Nueva Jersey, Estados Unidos. Dicho desastre fue capturado en cámara, y esa imagen ha quedado para la posteridad como un testimonio de nuestra historia tecnológica reciente. Eso sí, en blanco y negro y en baja calidad.

El metraje proveniente de Brithis Pathé, una antigua empresa de noticieros británica, ha sido restaurado en alta calidad. Concretamente, a 4K y a 60 fps por el canal de YouTube Olden Days, que se ha encargado de restaurar el archivo original aplicándole todo tipo de técnicas que habíamos visto en restauraciones anteriores.

Gracias a este vídeo, podemos observar uno de los accidentes más importantes de nuestra historia desde una perspectiva nunca vista hasta ahora. Algo impresionante, teniendo en cuenta que el archivo de vídeo se grabó hace 84 años.

El Hindenburg a 4K

Según explican desde el canal Olden Days, el vídeo ha recibido numerosas ventajas; estabilización, interpolación de fotogramas y sobre todo limpieza de daños. Esta clase de metrajes antiguos, debido a la forma en la que se grababan, se degradaban con el paso del tiempo; estas imperfecciones se han eliminado de forma correcta.

El vídeo se muestra a 60 frames por segundo, se ha reescalado mediante inteligencia artificial a resolución 4K y se ha aplicado una recolorización de todo el metraje. Todo mediante inteligencia artificial y tratamiento de imagen, que dan como resultado una imagen totalmente espectacular. Se ha eliminado el ruido, el polvo y los arañazos de la imagen.

Eso sí, hay que tener en cuenta varios detalles. Es cierto que el color de la imagen ese ve extraño en algunos planos, especialmente los que muestran al Hindenburg en el aire, pero hay que recordar que esta colorización se ha llevado a cabo sobre un vídeo de hace más de 80 años. 

Además, al ser los planos tan movidos debido a las limitaciones de la época, la colorización por inteligencia artificial no es perfecta. Todo ello en un proceso de tratamiento de vídeo que ha llevado 48 horas, y en un ordenador que además cuenta con un hardware excelente, con una RTX 2070 como GPU y un Ryzen 9 3900X como procesador.

No es la primera vez que vemos esta clase de documentos audiovisuales restaurados. La tecnología actual permite entre otras cosas aplicar colorización a vídeos antiguos en blanco y negro o realizar reescalados de resolución e interpolación de fotogramas por segundo para alcanzar esos tan ansiados 4K 60 fps. De esta forma, nos hacemos un poco más a la idea el cómo era vivir esta clase de sucesos sin las limitaciones tecnológicas de aquellos años.

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