Estos tractores autónomos cambiarán el campo y mandarán a los agricultores al paro
La compañía de maquinaria agrícola John Deere ha adquirido una empresa de tractores autónomos que permite manejar flotas enteras desde cualquier parte del mundo.
10 agosto, 2021 02:47Noticias relacionadas
Uno de los trabajos que más ha evolucionado en los últimos tiempos es el del agricultor. En muy pocas décadas, se ha pasado de usar aperos de labranza propios de la Edad Media a tener otros muy avanzados tecnológicamente. Y, como herramienta que todo lo une, está el tractor. En algunas zonas de España, principalmente en ambas mesetas, este vehículo es el centro de operaciones de miles de trabajadores todos los días y la evolución ha llegado a un grado extraordinario.
En este camino trabaja la compañía estadounidense Bear Flag Robotics que, con sede en el área de la Bahía de San Francisco, acaba de ser adquirida por el fabricante de maquinaria agrícola John Deere por 250 millones de dólares. Bear Flag fue fundada en el 2017 y en solo 4 años ha conseguido desarrollar un sistema de conducción autónoma para tractores muy avanzado.
"John Deere ve la autonomía como un importante paso adelante para permitir a los agricultores aprovechar sus recursos estratégicamente para alimentar al mundo y crear operaciones más sostenibles y rentables", según ha declarado Jahmy Hindman, director de tecnología de John Deere. Los vehículos autónomos son una de las grandes revoluciones actuales y se encuentra disponible en sectores tan punteros como el de la aviación.
Tractores autónomos
Una de las grandes bazas de Bear Flag Robotics es que emplea tractores -de los tradicionales con conductor- creados por John Deere como plataforma. Eso sí, adaptados para que puedan funcionar de forma autónoma tras instalar todo tipo de sensores, cámaras y software de gestión del vehículo.
Los tractores de la compañía poseen un conocimiento situacional de 360 grados capaz de monitorizar los accesorios, el estado del tractor y el entorno "para garantizar que cualquier problema se transmita de inmediato al operador". También apuntan a que el sistema de conducción autónoma es capaz de adaptarse a las necesidades del agricultor y de cambiar dependiendo el apero que vaya enganchado.
El usuario tendrá acceso a una herramienta de gestión remota de toda la flota de tractores autónomos, pudiendo gestionar varias tandas a la vez desde cualquier lugar del mundo. De esta forma, podrá monitorizar cómo y en qué están trabajando y acceder en tiempo real a información como la productividad o la calidad del trabajo realizado. A esta telemetría se añade la posibilidad de acceder en remoto a todas las cámaras que llevan a bordo los vehículos.
"Nuestro generador de rutas automatizado puede adaptarse a los límites del campo de cultivo, caminos, flujos de agua [ríos] y obstáculos como líneas eléctricas". A lo que también se añade un extra de protección contra obstáculos móviles como personas u otros vehículos que detienen al tractor.
Ese gestor de rutas incluye varias modalidades que permiten al agricultor elegir entre la forma más rápida de hacer el trabajo o bien optar por la más económica. Una vez configurado el mapa de campo y las rutas a seguir, el sistema puede transferir a toda la flota esa información de forma muy sencilla.
Otro de los puntos esenciales de la tecnología de Bear Flag Robotics es que el agricultor no necesita comprar un tractor nuevo. "Bear Flag proporciona a las granjas tractores autónomos completos que cobran solo por el trabajo que realizan", apunta. Algo así como un alquiler del vehículo autónomo solo mientras se necesita.
Modelos eléctricos
Si bien el esquema de Bear Flag Robotics es el de emplear tractores tradicionales a combustión, existen otras compañías que apuestan por ir un paso más allá y añadir el factor eléctrico a la ecuación. Ese es el caso de la también estadounidense Monarch, que cuenta con un tractor 100% eléctrico y autónomo, aunque sigue respetando el sitio del conductor por si se diera el caso.
Una de las principales bazas de los tractores como Monarch es que consiguen -en un formato muy pequeño- un par motor propio de vehículos más grandes. Esto es debido al motor eléctrico que incluye y que además no requiere de grandes gastos relacionados con el mantenimiento.
A todo lo anterior se une la faceta inteligente de un tractor capaz de recopilar todo tipo de datos para luego poder ser analizados. "El tractor de Monarch recopila y analiza los datos de los cultivos todos los días que trabaja en el campo", según afirman en la página web.
"Los sensores y las imágenes se procesan para proporcionar puntos de datos críticos que se pueden utilizar para ajustes de los aperos en tiempo real. Utilizando machine learning, el tractor de Monarch puede procesar esos datos y proporcionar un análisis a largo plazo de la salud del campo, mejorando la precisión a medida que se va utilizando".
El modelo base de Monarch parte de los 50.000 euros, dispone de 70 caballos de potencia durante más de 10 horas de autonomía y puede utilizar tanto los aperos de labranza actuales como la próxima generación de inteligentes que está llegando.