Los vecinos del barrio de Ciudad Lineal, en Madrid, pueden viajar al futuro durante unos días. En uno de sus parques se encuentra instalada de forma momentánea CyberHut, una casa inteligente que se fabrica en Santander, se controla por voz y puede medir tu salud; y que, al igual que la casa prefabricada Cube Two X, hace que te sientas por un momento en una película de ciencia ficción.
Se trata de una casa inteligente con un diseño futurista de apenas 50 metros cuadrados en el que cada espacio está aprovechado al máximo y que está repleta de tecnología: de inteligencia artificial que controla todo el hogar hasta 400 sensores para controlarlo todo. CyberHut está fabricada por Astroland, la primera agencia interplanetaria de España, y sus investigaciones se basan en la vida en hábitats extremos, como Marte.
El punto de partida de esta casa inteligente, que cuesta a partir de 150.00 euros, tiene el objetivo de hacer más fácil el día, se caracteriza por ser sostenible y controlar la salud del inquilino pues genera su propia energía y tiene aplicaciones que monitorizan las constantes vitales. "El siguiente paso es hacer una gran colonia en Madrid con diferentes unidades y acabados de la casa, que en 2022 permitirá vivir como en el futuro", expone David Ceballos, CEO de CyberHut, a EL ESPAÑOL - Omicrono.
Control por voz
CyberHut se ha construido con materiales no contaminantes y reciclables. Tiene un diseño de una especie de cápsula futurista de metal y cuenta con cuatro grandes patas que la sostienen y que actúan como mecanismo antisísmico, por lo que es resistente a los huracanes. Su zona inferior se puede abrir y da acceso a las 'tripas' de la vivienda para efectuar reparaciones, y hasta sirve de garaje para la bicicleta.
La casa genera su propia energía gracias a los paneles solares de alto rendimiento que tiene en el tejado, y la almacena en unas baterías para ser autónoma y no tener la necesidad de conectarse a la corriente. Éstas permiten una autonomía de 4,5 días, pensando en los casos de que el cielo esté nublado. Mientras que su zona frontal se puede abrir para dar paso a dos grandes ventanas que, desde el interior, dan acceso a una pequeña terraza.
Aquí no hay llaves, sino que se utiliza una aplicación para dispositivos móviles o una tablet para bajar y subir la rampa que da acceso a la vivienda. Al subir los escalones lo primero que te encuentras es un pequeño recibidor y una puerta. "Cuando entras no hay nada, un módulo que se puede mover y en función de lo que vas haciendo sale la cocina, las mesas... Todo lo que quieras pasará cuando lo necesites y el interior se personaliza según tus gustos, como si quieres una casa temática de fútbol o que en lugar de un gimnasio haya una zona gaming", señala David Ceballos.
Incluye sistemas de inteligencia artificial y sensores de big data que la convierten en una vivienda con un alto grado de automatización, que le permite adelantarse a las necesidades de los inquilinos y aprender sus rutinas. De esta manera, la asistente virtual, llamada Cybi y quien controla absolutamente todo de la casa, puede hacer un diagnóstico de los componentes de la vivienda, abrir los paneles para que entre luz, hacer la compra en función de tu dieta y de los productos que tengas en la nevera, entre otras.
"Cybi también puede organizar pedidos y recibir paquetes, preparar el café cada mañana para que esté listo cuando te levantes, mostrarte recetas en función de la comida que tengas en la nevera y hasta diseñar una rutina de entrenamiento personalizada o tu estrategia de longevidad a nivel personal", explica el CEO de CyberHut. Para activarla y hablar con ella basta con decir su nombre, como se hace actualmente con los asistentes de los móviles.
Mide tu salud
La casa también está pensada para cuidar la salud y el bienestar de los que viven en ella. Para ello, cuenta con un servicio de telemedicina y medicina preventiva, con un pequeño dispositivo que monitoriza tus constantes vitales. Un aparato que se coloca en uno de los dedos "para realizar diferentes mediciones y generar un historial que se puede subir a la nube para enviarlo al médico".
En tiempo de postpandemia, CyberHut también incluye filtros HEPA, tratamiento de choque mediante ozono y sistemas de purificación de aire y desionización del ambiente; y permite realizar videoconferencias con el médico y llamar a una ambulancia en caso de emergencia.
Además, y en términos de seguridad, incorpora protección climatológica y blindaje físico y cibernético, apostando por seguridad blockchain, ya que la casa maneja una gran cantidad de información personal del inquilino. "La vivienda incluye cámaras de reconocimiento facial que si te acercas demasiado te reconoce y un sistema de antiinclusión, llegando a auto blindarse para que nadie entre en ella", indica David Ceballos.
De gimnasio a un huerto
La inteligencia artificial permite que puedas programar tareas diarias para que la casa las cumpla de forma autónoma y CyberHut, que cuenta con más de 400 sensores conectados, se puede personalizar para que se adapte a tu estilo de vista, tus gustos o tu rutina de entrenamiento.
En esta ocasión había un pequeño gimnasio escondido con un saco de boxeo: "lo interesante es que los guantes tienen sensores que están conectados al entrenador personal para que sepa cómo das los golpes o si debes meter más potencia; quien luego te hace un resumen de la sesión, como las calorías que has quemado", explica el CEO.
CyberHut también tiene un 'modo fiesta' con el que la asistente virtual hace bajar una gran pantalla y activa un proyector para poner un videoclip y música, y cambia de color las luces de la casa. "Incluso tiene una máquina para tomarse la cerveza perfecta, ya que te la sirve a la temperatura ideal y con la espuma adecuada", explica el directivo.
La casa es totalmente personalizable, por lo que el usuario puede colocar los dispositivos que más se adapten a sus gustos. En la otra parte de la vivienda, la que está justo al fondo, se encuentra tanto un sofá como un vestidor, una cama y un televisor; estos dos últimos se ocultan en la pared y sólo salen cuando es necesario.
La casa también puede generar compost a partir de lo que se tira a la basura, que se usa para cultivar verduras en un pequeño huerto con capacidad para 37 unidades. Mientras que en el baño se encuentra la lavadora, el retrete y una ducha "que no necesita toalla, ya que incorpora un sistema de secado de cuerpo completo".
CyberHut tiene un depósito de agua de 4.500 litros y reutiliza el agua de la ducha y lavabos para el regadío. La compañía también ha creado "diferentes modelos de la casa para el metaverso. Con unas gafas de realidad virtual puedes conocer y experimentar la vivienda", y hasta cuentan con arte digital NFT: una interpretación visual del 'Jardín de las delicias' de El Bosco.
Desde 150.000 euros
La casa inteligente se puede controlar a través del teléfono móvil gracias a la aplicación 'Neurohome' que permite ver toda la información de la vivienda en tiempo real, como el estado de las baterías. "En caso de que algo vaya mal, envía notificaciones. También cuenta con una tienda para bajarse nuevas apps". Además de ello, también se puede usar tanto alguna de las tablets que hay instaladas en la vivienda como Cybi o el asistente de Google.
Cyberhut está planteada para un pago por uso, "esto facilita el acceso a la vivienda a los jóvenes y permite cambiar de ubicación en cualquier momento, pudiendo disfrutar en un tiempo prolongado del hogar del futuro, con todas sus prestaciones y sin permanencia", concluye el CEO. Comprar la casa parte de los 150.000 euros, pero el precio final depende del nivel de personalización y de la ubicación.
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