La impresionante foto del avión antinuclear de Joe Biden repostando en vuelo
El Boeing E-4B es el avión del Juicio final del presidente de Estados Unidos y puede permanecer 7 días en vuelo gracias a los aviones cisterna.
5 mayo, 2022 14:28Noticias relacionadas
De entre todos los aviones exclusivos que posee Estados Unidos, el Boeing del Juicio final (Doomsday Plane) es sin duda el que más secretos guarda. Esta aeronave tan particular es el refugio antinuclear volador del presidente del país y de su plana mayor en caso de ataque. Sin un modelo homólogo en España, cada vuelo de esta fortaleza aérea es todo un acontecimiento y todavía más cuando salen a la luz fotografías en pleno vuelo.
La última de ellas la ha publicado la propia Fuerza Aérea de Estados Unidos donde se puede ver al Boeing E-4B, conocido oficialmente como Doomsday Plane, tomando combustible de una aeronave cisterna KC-46A, también fabricada por Boeing.
La instantánea, tomada en un lugar no revelado del sur del estado de California, muestra la forma en la que el avión antinuclear se reabastece en pleno vuelo utilizando una lanza que se acopla al morro. De esta forma, puede rellenar sus tanques de combustible y permanecer en el aire hasta una semana en caso de que fuera necesario. La única limitación conocida, proviene del abastecimiento de víveres y del consumo de aceite de sus motores.
Al igual que el Air Force One, el E-4B tiene su base en el Boeing 747-200. Pero nada tiene que ver con el equivalente fabricado para vuelos comerciales. Este refugio aéreo se diseñó exclusivamente para resistir a los envites de una bomba nuclear, para lo que se eliminó todo sistema digital vulnerable al pulso electromagnético que producen este tipo de armas.
También equipa circuitería eléctrica reforzada, un sistema de aire acondicionado específico para aclimatar la cabina y protección térmica y antiradiación extra. Todo este equipamiento convierte al avión en la fortaleza aérea perfecta. Además, dispone de todo lo necesario para que el presidente de Estados Unidos puede ejercer sus laboras de comandante general junto con el secretario de Defensa y el Estado Mayor en su totalidad.
Un equipo de técnicos se encuentra dentro del avión 24 horas al día los 7 días de la semana garantizando la operatividad de la aeronave, mientras que el resto de la tripulación asignada esperan a la orden en barracones cercanos a la base militar.
En una prueba de resistencia, el avión permaneció en vuelo durante más de 35 horas, aunque por diseño es capaz de mantenerse durante una semana. La Fuerza Aérea de Estados Unidos cuenta con un total de 4 de estas aeronaves que van rotándose para entrar en mantenimiento. Se estima que cada una de ellas tiene un valor de 250 millones de dólares y que el coste de operación asciende a 160.000 dólares a la hora.
El desarrollo del avión comenzó en 1973 cuando la Guerra Fría librada entre Estados Unidos y la Unión Soviética se encontraban en uno de los puntos más álgidos de ataque nuclear. Desde entonces, la aeronave apenas ha sufrido remodelaciones —más allá del mantenimiento— y conserva intacta la tecnología analógica con la que fue construido.
Consta de 3 plantas muy diferenciadas. La superior, situada tras la cabina, es la zona reservada para los pilotos y de todo el equipo de navegación. La segunda, correspondiente a la zona principal más amplia, alberga una zona de reuniones, todo el equipo de telecomunicaciones y salas de toma de decisiones; además de una zona reservada al descanso.