Hemos oído hablar en muchas ocasiones de coches y motos voladores, los que se presuponen que serán los vehículos del futuro. No obstante, suelen ser dispositivos prototípicos que nunca llegan a alcanzar mercados en España ni en el resto del mundo. Esto ha cambiado, ya que han presentado la primera moto voladora a la venta.
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Se llama XTURISMO, y ha hecho su presentación oficial en la convención automovilística Auto Show en Detroit (Estados Unidos). Una moto que ha realizado una demostración, con un piloto manejándola y volando en posición vertical a casi un metro de altura. Ya tiene precio, por lo que teóricamente se puede comprar, según recogen en Reuters.
Decimos teórica por su precio. Cuesta la increíble cifra de 770.000 dólares, algo inasumible para la mayoría de mortales, aunque la firma detrás de esta moto cree que para dentro de un par de años podrán bajar su precio a 50.000, algo (dentro de lo que cabe) más razonable para los usuarios de a pie, tal y como aseguran en The Byte.
La primera moto voladora
Esta moto, que parece un híbrido entre un dron y una moto convencional, alcanza unas velocidades máximas de entre 80 a 100 kilómetros por hora. Su alcance es reducido, de 40 kilómetros, y está impulsada por un motor Kasawaki híbrido, de combustión interna y que hace uso de baterías. Por supuesto, el alcance dependerá principalmente del uso que se le dé a la moto; si se usa a máxima velocidad todo el rato, el alcance será incluso menor.
La firma detrás de esta moto, la startup AERWINS Technologies, ya ha puesto la moto a disposición del mercado en Japón, y planea un segundo lanzamiento de una versión más reducida para Estados Unidos, que se irá a 2023. El motivo de esto es sencillo; aunque AERWINS Technologies resida en Estados Unidos, es de propiedad japonesa.
La moto en sí tiene un peso de 300 kilos, tiene unas dimensiones de 3,7 x 2,4 x 1,5 metros y para volar incorpora hélices al más puro estilo dron, un combo de 6 para realizar su vuelo. Admite un peso máximo de 100 kilos en total, algo que limita el número de pasajeros que esta moto puede tener. Tiene raíles de aterrizaje que hacen las veces de patas, capaces de aguantar hasta 300 kilos incluyendo el peso en sí de la moto.
Hay que aclarar que el hecho de que esta moto esté a la venta (o que al menos tenga precio) no es óbice para olvidar todos los problemas legales que supone volar este tipo de dispositivos. Los usuarios tendrán que adecuarse a las legislaciones de vuelo de cada país, lo que podría implicar varios escenarios, desde que la moto no tenga permiso para volar hasta que el propietario necesite un permiso especial.
Shuhei Komatsu ha declarado en Reuters que aunque la moto genere un poco "de aprensión", es completamente increíble. "Yo estaba tan emocionado. Literalmente se me puso la piel de gallina y me sentí como un niño pequeño".