Este mes de abril, se ha registrado en España un 85% menos cantidad de lluvia de lo normal. Una climatología muy preocupante en nuestro país, con 11 comunidades autónomas en situación de alarma o extrema preocupación por la falta de precipitaciones, algo que ya está teniendo graves consecuencias en el sector agrario y en el precio de los alimentos. Por eso, son más necesarias que nunca tecnologías como el invento español para regar el campo gastando hasta un 70% menos de agua o dispositivos como SmartWater, que permite ahorrar un 40% en el suministro de los hogares.
Si persiste la sequía, una de las más graves desde que se tienen registros, este verano se producirán restricciones provocadas por la escasez de agua en varias zonas de España. Una de las tareas cotidianas en las que más agua se consume es la ducha: pasar 5 minutos bajo el agua conlleva un gasto de 100 litros, que equivale a lo que suele beber una persona en 50 días. Desde hace unos años, varias compañías buscan reducir ese despilfarro con soluciones tecnológicas basadas en la recirculación y purificación del agua en un circuito cerrado.
De estos proyectos, el pionero y el más avanzado hasta la fecha es el que propone Orbital Systems, que permite ahorrar hasta un 90% de agua y un 80% de energía, al tiempo que aumenta el confort y la higiene. Esta compañía sueca fue fundada en 2012 por el diseñador industrial Mehrdad Mahdjoubi tras una colaboración entre la NASA y la Universidad de Lund para idear un suministro de agua sostenible de las futuras misiones a Marte. "Hemos estado tirando de la cadena del váter con agua potable y usando 100 litros para ducharnos. Me sorprendió que no se hubiera hecho nada al respecto", dijo en su día Mahdjoubi en declaraciones a Bloomberg.
Recirculación y purificación
El "Tesla de las duchas", como se conoce a Orbital Systems en el sector tecnológico, funciona como una planta de reciclado de aguas residuales en miniatura, que actúa en tiempo real y da la sensación de ofrecer un chorro constante de agua nueva. Todos los componentes quedan ocultos tras un panel, lo que da una sensación extra de limpieza y confort. No hay ni rastro de grifos: el usuario acciona un gran botón táctil resistente al agua y elige la temperatura y el nivel de presión deseados o selecciona uno de los programas prefijados gracias al anillo giratorio que rodea el botón.
Una vez activado el sistema, el agua fluye desde la tubería hasta la alcachofa, como en una ducha normal. En el desagüe, un sensor mide 20 veces por segundo si la calidad del agua es suficiente como para poder reciclarla. Si es así, empieza el proceso de reciclado: un microfiltro deja fuera las partículas grandes, como la piel o el pelo, y un segundo filtro se encarga de eliminar las impurezas a una escala nanométrica.
El agua pasa después por un filtro con luz ultravioleta, encargado de acabar con todos los posibles gérmenes presentes en el agua. En ese momento, cuando sólo está unos grados más fría de como ha salido de la alcachofa, pasa por un calentador, que aumenta la temperatura hasta conseguir el punto exacto deseado por el usuario. Purificada en tiempo real, el agua está más limpia incluso que la que sale de los grifos normales.
Finalmente, Orbital Shower realiza una secuencia de autolimpieza para
vaciar y preparar el sistema para el siguiente usuario. Para mantener la higiene en un nivel óptimo, es necesario cambiar los filtros cada 200 duchas, con una operación sencilla que puede realizar cualquier usuario sin conocimientos de fontanería. Los responsables de Orbital Systems calculan que una familia media de cuatro personas tendrá que reemplazarlos unas tres veces al año.
Los datos sobre el consumo de agua y el estado de los filtros se registran digitalmente y pueden ser monitorizados fácilmente por cualquier usuario. Todo se centraliza en una app para móviles, en la que ver con detalle el ahorro de agua acumulado y configurar todas las opciones que ofrece el sistema. Entre las curiosidades de Orbital Shower, el gran botón circular que activa el encendido o apagado del sistema permite hasta jugar a un juego mientras te duchas.
Despliegue y precio
En 2015, como parte de un despliegue experimental, Orbital Systems instaló 50 duchas en lugares como la piscina al aire libre de Ribersborg, en la ciudad sueca de Malmö. Desde entonces, cualquier cliente puede encargar la suya, que se sitúa en un rango de precios entre los 4.000 y los 5.500 euros en su modelo más caro.
Ese es precisamente uno de los principales problemas a los que se ha enfrentado la empresa de Mahdjoubi, un elevado coste al que hay que sumar el de la instalación. Por eso, sus clientes más habituales desde sus inicios son hoteles y empresas de construcción especializadas en viviendas de lujo, que incorporan este tipo de servicios a su oferta.
En cualquier caso, la inversión de grandes fondos en Orbital continúa (en 2022 la empresa recibió una inyección de cerca de 23 millones de euros), y sus responsables insisten en que sus duchas se pueden amortizar en tres años y medio gracias a los grandes ahorros que supone.
La web de la compañía incluya una útil calculadora de ahorro. Para una familia media, eso se traduce en 151.780 litros de agua y 5.218 kWh menos cada año. Sumando todos sus clientes, el ahorro que han proporcionado los productos de Orbital Systems alcanza los 17 millones de litros de agua, 650.000 kWh de energía y 183.995 kg de CO2.
Más allá de estas cifras, lo que suponen iniciativas como Orbital Shower son soluciones inmediatas y directas frente a la sequía y a las posibles restricciones de agua derivadas de la escasez de lluvia. Una dirección en la que sigue trabajando la empresa de Mahdjoubi, que ya prepara Orbital Tap, una versión de su tecnología para los grifos del lavabo.
También te puede interesar:
- La ingeniosa depuradora que aprovecha las aguas residuales para producir luz barata y agua potable
- Así es la tecnología que vigila el alcantarillado de Madrid y evita inundaciones
- Así es Sandi, el ingenioso inodoro que funciona sin agua inventado por un estudiante de 21 años
- La botella perfecta para excursiones: convierte en potable el agua recogida de fuentes naturales