España por fin está aprovechando todo su potencial como productor de energía solar. Desde el pasado 5 de mayo y durante varios días consecutivos, la producción de fotovoltaica superó por primera vez durante un tiempo prolongado a la eólica y la nuclear como principal fuente de energía del sistema eléctrico español. Eso se debe al inusual clima que estamos viviendo estos días de primavera, pero también a avances tecnológicos como el ingenioso vidrio español que jubilará a las placas solares y se instala en fachadas y tejados.
En esa misma línea, desde hace varios años distintas empresas buscan integrar sus paneles en tejas, para convertir el material encargado de cubrir los tejados en una superficie capaz de generar energía sin dañar o alterar la estética de las casas. Hay una gran variedad de modelos en el mercado, entre los que destacan las tejas valencianas capaces de rebajar la factura de la luz hasta un 60% o los paneles solares 'invisibles' que ya se usan en Pompeya.
Pero la innovación no cesa y Meyer Burger, uno de los fabricantes de soluciones fotovoltaicas más importantes de Europa, tiene casi listo el que será su lanzamiento más importante de este 2023: una teja solar de alto rendimiento que se integra a la perfección en los tejados y supera muchas de las limitaciones de este tipo de productos.
La empresa suiza acaba de anunciar su acuerdo con Magog, distribuidor alemán de productos fotovoltaicos, para su versión gris que imita la pizarra, mientras sigue comprobando la eficiencia y la resistencia de las tejas en varios proyectos piloto. Hasta la fecha, todo indica que tiene el potencial de revolucionar el mercado: son más ligeras, potentes y fáciles de instalar que las soluciones actuales y no tienen las limitaciones de otros productos similares.
Cómo son las tejas solares
La compañía alemana presentó por primera vez la Meyer Burger Tile en la feria Intersolar Europe 2021 y, desde entonces, ha ido revelando sus características y anunciando distintos acuerdos para su producción en serie y su distribución, como este recientemente cerrado con Magog. Gracias a él estará disponible en toda Europa a partir del tercer trimestre de este año la versión de la teja solar para tejados de pizarra.
El producto, galardonado en 2022 con el premio Highlight Top Innovation de la revista especializada pv magazine, está pensado para edificios cuyos tejados no están diseñados para una fotovoltaica de tamaño e inclinación óptimos, cubiertas con cargas limitadas o incluso edificios protegidos o históricos.
Sus dimensiones son de 300 mm de ancho y 340 mm de largo, pero la gran novedad está en su peso: sólo 2,7 kg, mucho menos que una teja tradicional. En un metro cuadrado, gracias a la superposición, caben entre diez y once de estas tejas, con una capacidad de 15 Wp en las pruebas realizadas gracias a su eficiencia del 17%. Eso implica que cada metro cuadrado cubierto con las Meyer Burger Tile generará entre 150 y 165 Wp.
En el proyecto piloto más grande realizado hasta la fecha por los técnicos de Meyer Burger han utilizado 1.280 de estas tejas para lograr una potencia total de 19,2 kWp, una potencia muy superior a lo que necesita una casa estándar para cubrir el 100% de su suministro eléctrico.
A diferencia de otras tejas solares disponibles en el mercado, aquí las células solares no se encajan en la superficie de piedra o en un elemento plástico que imite la cerámica, sino que se integran en una caja metálica plana. Esta tiene 2,6 cm de altura y una tapa deslizante para poder acceder fácilmente al interior, donde se encuentran los cables y enchufes de unión, protegidos de la humedad o el polvo.
Para lograr el reducido tamaño y peso de las tejas, las células solares están encapsuladas entre dos capas de vidrio de 6,2 mm de espesor, lo que los hace resistentes a inclemencias del tiempo, como el granizo de hasta 55 milímetros.
Para extraer el aire caliente generado por el sol, que podría perjudicar la eficiencia de las placas, las Meyer Burger Tiles cuentan con rendijas de ventilación frontales, mientras que el aire más frío fluye desde abajo. Las formas metálicas son algo más largas que la superficie fotovoltaica, para que puedan superponerse en el tejado como las tejas tradicionales.
Seguridad y producción
Al estar clasificadas como cubiertas rígidas, las tejas solares de Meyer Burger se pueden instalar sin dejar espacios libres de seguridad adicionales: el instalador las puede pisar y pasar por encima de ellas con total tranquilidad.
Además, la compañía ofrece una garantía de producto y rendimiento de 30 años. Eso significa que, transcurridas esas tres décadas, el rendimiento debe seguir siendo como mínimo del 93,2%, lo que implica una durabilidad mucho mayor que las células convencionales actuales.
"Las tejas se probaron en los laboratorios de conocidos fabricantes para todas las condiciones meteorológicas y superaron todas las pruebas para los momentos en que en lugar de sol, granizo, lluvia, viento y hielo vienen de arriba", indicó en redes sociales el CEO de la compañía, Gunter Erfurt.
"El diseño de nuestra Meyer Burger Tile permite una apariencia uniforme y estética en toda la superficie de la cubierta y, por tanto, es ideal para aplicaciones arquitectónicas exigentes", sostiene Moritz Borgmann, Director Comercial de la empresa suiza. La teja está pensada para su uso en tejados privados de nueva construcción o en casos de sustitución de tejados, en propiedades en zonas de rehabilitación y edificios protegidos.
Tras la finalización de la actual fase piloto, el lanzamiento al mercado de Meyer Burger Tile está previsto para el segundo semestre de 2023, inicialmente sólo en Alemania, Austria y Suiza, y más adelante en el resto de Europa. Frente a otros fabricantes, que recurren a materiales y fábricas de China, la empresa suiza se encarga de producir en sus instalaciones tanto las células solares como la tecnología de interconexión.