En la mañana del martes 6 de junio en España, Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, publicó un tuit en el que señalaba que "los terroristas rusos" han "destruido" la presa de Nova Kajovka, una infraestructura estratégica construida sobre el río Dnipro en la región de Jersón. Un ataque que provoca que al menos 80 pueblos estén en amenaza de inundación rápida y riesgos para la central de Zaporiyia.
Se conoce que los residentes de 300 casas han sido evacuados y 22.000 personas que viven en asentamientos en Jersón corren el riesgo de sufrir inundaciones. Además, este desastre afectará al sistema de irrigación en el sur de Ucrania y el nivel del agua en Nova Kajovka ya ha aumentado más de 10 metros después dela explosión, que ha dejado la central hidroeléctrica "completamente destruida", como ha informado Suspilne, la emisora estatal de Ucrania.
La presa de Nova Kajovka, construida en 1956 como parte de la central hidroeléctrica Kajovka y situada a 30 kilómetros al este de la ciudad de Jersón, en el sur del país, es una instalación muy importante para Ucrania. La infraestructura posee una enorme reserva de agua, mide 30 metros de alto y 3,2 kilómetros de largo, y atraviesa el enorme río Dnipro; y tenía como propósitos la generación de energía, el riego y la navegación.
Gran volumen de agua
La presa de Nova Kajovka tiene una capacidad instalada de 357 MW y contiene aproximadamente 18 kilómetros cúbicos de agua, que es prácticamente el mismo volumen que el Embalse de la Serena, el más grande en España y que está situado en Badajoz. El gran problema del ataque reside en que al reventar la infraestructura se podría enviar un muro de agua que inunde los asentamientos cercanos.
El agua del embalse abastece a la península de Crimea, al sur, por lo que su explosión es un gran problema; además de servir para enfriar la central nuclear de Zaporiyia; aunque la agencia estatal de noticias rusa RIA ha asegurado que la seguridad de la instalación y la situación "está controlada", por lo que actualmente no hay amenaza para la planta nuclear, la más grande de Europa y que Rusia ocupa desde marzo de 2022.
El 24 de febrero de 2022, la presa fue capturada por las fuerzas rusas durante el conflicto en Ucrania. Tras semanas de ataques de artillería por parte de Ucrania en los meses de agosto y septiembre, se informó que la capacidad de la instalación para transportar vehículos se había degradado, pero la presa en sí misma conservaba su integridad estructural.
A mediados de octubre del año pasado los informes sugerían que los rusos podrían haber planeado volar la presa con el objetivo de frenar la contraofensiva ucraniana en la región, pero no llegó a suceder. Sin embargo, el 11 de noviembre sí que se produjo una gran explosión en la presa, pero ésta permaneció prácticamente intacta.
[Una mini central hidroeléctrica en casa: la idea de un jubilado para dar luz gratis a su barrio]
Ahora las fuerzas rusas han destruido esta instalación, que se sumaría a los problemas energéticos actuales de Ucrania y que está provocando que la crecida del río desplace los campos de minas que habían colocado los dos ejércitos en la zona, que ya han comenzado a estallar.
También te puede interesar...
- La gigantesca batería de agua que revoluciona la energía en Europa: abastece a 800.000 hogares
- Baihetan, la nueva central hidráulica china que dobla en potencia a todas las nucleares de España
- La pequeña turbina inteligente que transforma la corriente de ríos y arroyos en energía limpia
- Imprimir una presa en 3D, el próximo reto de China para la central hidráulica de Yanqdu