En los últimos años ha crecido exponencialmente la venta de minicasas, viviendas prefabricadas, generalmente de un precio asequible, cuya facilidad de instalación y pequeño tamaño las hacen ideales para acomodarse en lugares alejados del mundanal ruido. Suelen tener un tamaño muy reducido para facilitar su transporte, pero existen algunos modelos que, una vez instalados, se despliegan para ofrecer más espacio, como la minicasa barata que se despliega y triplica su tamaño en 15 minutos pulsando sólo un botón.

En ese caso, la PODX GO se desplegaba a lo ancho, pero hay otras alternativas. La última en llegar al mercado es la Vagabundo Flex, una pequeña casa que puede expandirse en vertical hasta tener dos plantas a través de un sistema de techo elevable automatizado. 

Fabricada por la constructora alemana Vagabundo, la casa está construida a partir de una robusta estructura de acero y un entramado interior en madera. Este material es el gran protagonista del interior, ya que hay tres capas de madera de abeto en los paneles interiores y los grandes ventanales panorámicos de doble acristalamiento cuentan con carpintería de madera-aluminio.

Dos espacios

La principal diferencia de la Vagabundo Flex con otras minicasas estriba en la calidad premium de los materiales de construcción y en su innovador diseño desplegable. A través de unos mecanismos hidráulicos ocultos en la estructura, para no afear la estética de la vivienda, el sistema automático eleva el techo hasta los 6,2 metros, lo que genera un espacio superior para el dormitorio y un estudio.

En total, la superficie de la casa alcanza los 28 metros cuadrados, divididos en las dos plantas. La de abajo dispone de una sala de estar de planta abierta con tres puertas plegables que se abren a la terraza exterior. Además, tiene otra zona de estar con ventana panorámica, una espaciosa cocina y un cuarto de baño con ducha e inodoro de incineración, para no tener problemas con los residuos. También cuenta con calefacción de suelo radiante y una estufa de leña opcional.

Interior de Vagabundo Flex Vagabundo Omicrono

A la segunda planta se llega a través de unas cómodas escaleras, que dan acceso a un amplio dormitorio con una ventana tipo ojo de buey por donde entra la luz. A su lado, hay un espacio que se puede aprovechar para instalar una diminuta oficina, lo que lo hace ideal para el teletrabajo.

Vagabundo Flex está disponible en tres configuraciones de instalación distintas. Se puede mantener la casa sobre ruedas montándola sobre un remolque, apoyarla sobre soportes de gran resistencia, lo que ofrece espacio de almacenamiento adicional debajo de la casa, o utilizar una grúa para colocar la minicasa sobre unos cimientos si no se tiene previsto moverla. En todo caso, para el transporte es necesario plegar la planta superior, para poder subirla a un remolque o a un camión.

Frente a otras alternativas más baratas, ya sea por lo reducido de sus dimensiones o por materiales de menor calidad, la Vagabundo Flex está a la venta en toda Europa con precios a partir de los 180.000 euros.

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