El avance de la tecnología ha permitido una sorprendente evolución de los robots, que, en la actualidad, se han vuelto más inteligentes y versátiles. Unas máquinas que en España ya hasta se pueden encontrar en el hogar haciendo tareas como vigilar la casa y cuidar de la familia con inteligencia artificial (IA) y hasta convertirse en asistentes, como Astro de Amazon. Pero hasta ahora no se había visto nada como Morphobot (M4), una máquina inspirada en los animales que es capaz de desplazarse tanto por tierra como por aire.
Los diseños de los robots se pueden inspirar en la naturaleza, donde hay muchos ejemplos de estrategias de locomoción muy resistentes y tolerantes a fallos para desplazarse por terrenos complejos utilizando apéndices multifuncionales. Basándose en algunos animales, como pájaros, suricatas y focas, unos científicos han creado un robot al que han apodado Morphobot (M4) y que han diseñado para desplazarse por diversos terrenos terrestres y aéreos, como indican en la revista científica Nature.
Esto se debe a que este robot es capaz de transformar sus extremidades entre ruedas, propulsores, patas y manos. Gracias a ello Morphobot (M4) puede desplazarse de distintas formas para moverse por su entorno: ya sea volando, rodando, arrastrándose, agachándose, haciendo equilibrios o dando volteretas. Un avance que convierten a esta máquina en un recurso ideal para ocasiones de búsqueda y rescate tras catástrofes naturales - como terremotos, inundaciones o vendavales-, para la exploración espacial y el reparto automatizado de paquetes.
Por tierra y aire
Algunos animales pueden adaptar el uso de sus extremidades para enfrentarse a distintos terrenos. Por ejemplo, los leones marinos pueden caminar por tierra con las aletas y las suricatas se sostienen sobre sus extremidades posteriores para explorar mejor su entorno. Asimismo, los pájaros chucar -un tipo de perdiz- pueden usar sus alas para subir a cuatro patas por pendientes pronunciadas.
Imitando la capacidad de reutilización de las extremidades de los animales, en la actualidad se pueden diseñar robots móviles con estas características para que recorran terrenos complejos adaptando algunas de sus partes para adaptar mejores estrategias de movimiento. Y de ahí nació la idea de M4, un robot de cuatro patas con dos articulaciones cada una y ventiladores en los extremos para volar.
El robot cuenta con un diseño discreto, un peso de 6 kilogramos y unas medidas de 70 centímetros de largo, 35 cm de alto y ancho. Una de sus principales características de esta máquina es que sus ventiladores pueden funcionar como patas, propulsores o ruedas; lo que le permite adaptar sus movimientos para caminar por terrenos accidentados y complicados, evitar obstáculos, arrastrarse por senderos de techo bajo y volar a niveles superiores.
"El M4 puede atravesar pendientes pronunciadas de hasta 45 grados y terrenos abruptos con grandes obstáculos cuando está en modo de equilibrio. Además, posee ordenadores y sensores a bordo para reconocimientos aéreos y puede emplear de forma autónoma sus modos para moverse mejor en cualquier entorno no estructurado", destacan sus creadores en un comunicado.
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