Las bicicletas eléctricas se han convertido en el medio de transporte de cabecera de muchas personas en España. Las ciudades, con sus protocolos y leyes anticontaminación, propician la transición desde el coche tradicional a otros métodos de transporte más amigables con el medioambiente. Con todo ello, una de las mejores alternativas a comprarse una bici nueva es convertir una tradicional a eléctrica, para lo que diversas compañías han creado kits de fácil instalación.
Una de ellas es Lightest ("El más ligero", en castellano) que tiene en su catálogo el motor más ligero —menos de 2 kilogramos— de su clase y que cuenta con una compatibilidad casi plena para las bicis sin asistencia eléctrica, las de toda la vida. Para ello cuenta con diferentes juegos y configuraciones elegibles según las necesidades de cada usuario.
Estos sistemas funcionan incorporando un pequeño motor al eje pedalier de la bicicleta, que genera un cierto par de giro a la cadena gracias a la alimentación de una batería que también se instala a bordo, normalmente en el cuadro. Más que actuar como el motor de un patinete o una moto eléctrica, el de las bicis ayuda al pedaleo del ciclista haciendo que las cuestas arriba sean más asequibles y se consiga mayor velocidad llaneando.
El más ligero
Una de las claves que hay que tener más en cuenta en estos casos de conversión es el peso. Como su propio nombre indica, Lightest consigue reunir toda la unidad de potencia en 1,75 kilogramos. Según indica la propia compañía, se trata del motor más ligero de su tipo de cuantos existen en el mercado, con un peso parecido al de una botella de 1,5 litros de agua. Por su parte, el kit completo incluyendo la batería incrementa su masa hasta los 4 kilogramos.
Para conseguir tal reducción de peso, según explica, los ingenieros emplean materiales como una aleación de aluminio para los escudos y aletas de enfriamiento extragrandes para mejorar la disipación del calor. Para los engranajes, elementos clave expuestos a grandes esfuerzos, han optado por el acero cementado.
En cuanto a las dimensiones, el motor tiene 90 x 102 x 148 milímetros y se puede coger con la mano. Ser relativamente pequeño y ligero no significa que no consiga un alto rendimiento: tiene una potencia de hasta 1.000 W con un par de 90 Nm para la versión estándar y 120 Nm para la versión más avanzada.
"Siente la verdadera esencial de tu viaje a medida que el tensor de la cadena detecta el par ejercido sobre los pedales y lo traduce a la perfección en potencia de salida del motor". Este sensor incorporado sabe por el esfuerzo que hace el usuario el nivel de asistencia al pedaleo que tiene que proporcionar. "Esta tecnología innovadora garantiza una experiencia de conducción natural, lo que permite conectarte con tu bicicleta como nunca antes", señalan en su página web.
Otra de las características de este kit de Lightest es que cuenta con giro de rueda libre cuando el motor se desconecta. Con esta particularidad se consigue que el ciclista no tenga que hacer un sobreesfuerzo moviendo todos los engranajes internos cuando el sistema esté apagado.
Gran autonomía y conectividad
Lightest cuenta con varias configuraciones de baterías a elección del usuario que van desde los 220 Wh hasta los 840 Wh, proporcionando una autonomía que parte de los 30 y llega a los 180 kilómetros.
El apartado de la conectividad también está resuelto con el kit, que incluye versiones con conexión al smartphone para conocer la telemetría del motor, la monitorización del ritmo cardiaco y un sistema antirrobo. Todas estas funciones sólo están disponibles en la versión Superhero (la más cara de todas). Esta incorpora de serie una pequeña pantalla que se coloca en el manillar y desde donde consultar algunos datos básicos como la velocidad, el odómetro o el nivel de carga de la batería.
Desde la compañía destacan la facilidad de montaje y desmontaje. "Retira el motor en 5 minutos, sólo 3 tornillos sujetan el motor en su lugar". Además, se pueden comprar placas de montaje extra, para que el mismo motor pueda instalarse en más de una bicicleta.
La versión más básica con un motor de 250 W, con el empuje máximo de 90 Nm y la batería de 220 Wh, tiene un precio de 1.099 euros. Por su parte, la versión más avanzada con el motor de 1.000 W, el par de 120 Nm, la batería de 800 Wh y el pack Superhero llega hasta los 1.738 euros. La lista de configuraciones es extensa y prácticamente se puede elegir un kit a la carta.