Los taxis voladores o los EVTOL son una industria en ciernes que aspira a convertir en realidad esa idea futurista de coches por el aire y calles más despejadas de tráfico. Aunque sigue siendo un futuro lejano, cada vez más propuestas, algunas incluso de España, se acercan a sus metas como este avión transformable que pasa de motocicleta a avión en pocos minutos y puede volar a más de 150 metros de altitud como ha demostrado en su primera prueba por el aire.
Un año después de conseguir la aprobación de la FAA, el avión Samson Sky Switchblade ha realizado su primer vuelo. En el Aeropuerto Internacional Grant Country en Moses Lake, Washington, despegó esta semana por primera vez alcanzando una altitud de 150 m y dando vueltas hasta aterrizar seis minutos después.
"Después de 14 años de diseño y pruebas rigurosas, nuestro primer vuelo es un gran hito", ha dicho Sam Bousfield, director ejecutivo de Samson Sky y diseñador de Switchblade. Su principal objetivo es producir miles de estos aviones convertibles para cubrir las demandas que afirman estar recibiendo. Los futuros propietarios de este vehículo deberán montarlo por su cuenta.
Samson Sky Switchblade
La compañía afirma que cuenta con unas 2.300 reservas para el Switchblade, de 57 países diferentes, a un precio inicial estimado de 170.000 dólares, tal y como indica el medio NewAtlas. Su formato y calificación como motocicleta facilita que sea aprobado para circular en diversas jurisdicciones, aún así está aún en una fase temprana. Estos primeros vuelos de prueba sirven a la compañía para recabar datos y finalizar el diseño de los últimos prototipos antes de producirlo a gran escala.
Este vehículo de tres ruedas pasa de rodar por la calle a convertirse en un avión que alcanza los 320 km/h con solo tocar un botón. En su interior hay espacio para dos asientos y cuenta con un tanque para combustible de 125 litros. Cuenta con un sistema híbrido que combina la gasolina normal de 91 octanos y que consigue una autonomía de 805 km.
Samson Sky Switchblade plegado
Por carretera puede alcanzar velocidades superiores a 200 km/h mientras mantiene las alas y la cola plegadas. Por el aire, cuando está volando alcanzará hasta 322 km/h y 400 m de altitud. La transformación de un elemento a otro requiere de un tiempo, la empresa aún no ha mostrado el proceso completo que es automático y requiere que la cola se extienda y despliegue, mientras las alas salen de debajo del chasis y se fijan en los laterales.
El mecanismo puede tardar unos minutos. Además, requiere de unos 335 m de asfalto despejado como mínimo para despegar. Pero esta propuesta puede facilitar el desplazamiento del aeródromo al garaje y no tener el avión guardado en un hangar.
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Este avión se vende como un modelo experimental que el usuario debe montar por sí mismo. No obstante, pretenden crear un centro para que los propietarios reciban ayuda durante el montaje y tengan disponible todo el material. Se estima que puede tardar una semana en completar el vehículo.