Los deportes acuáticos son cada vez más populares en España, y en gran parte eso se debe a las facilidades que ofrecen los avances tecnológicos. Pocos han despertado tanta expectación en el sector como los eFoils o tablas motorizadas 'con alas', que permiten surfear en cualquier situación, también en lagos o zonas de aguas tranquilas, sin necesidad de tener que esperar a una gran ola para impulsarte sobre la superficie del mar. Algunas de ellas pueden alcanzar incluso los 55 km/h.
De todos los fabricantes que han apostado por los eFoils, uno de los pioneros más destacados es la marca australiana Fliteboard, que lleva años lanzando modelos cada vez más potentes y ligeros. Su último producto, presentado la semana pasada en el Salón Náutico Internacional de Miami, es Flite Air, una versión renovada más barata e hinchable, equipada con el eFoil que permite que la tabla se deslice por encima del agua.
La compañía lleva trabajando en ella desde 2018, con la idea de ofrecer una entrada más asequible a esta práctica deportiva sin perder las prestaciones de sus productos más premium. La Flite Air cambia la fibra de carbono por un núcleo de espuma sólida y una cámara exterior inflable, lo que la hacen más fácil de transportar, más ligera y con una respuesta más rápida.
Bajo la tabla se encuentra el eFoil, con su mástil de aluminio y un motor con una potencia de 4 kW en sus dos versiones, con hélice y protector o con chorro de agua (Flite Jet), además de cuatro juegos de alas disponibles para elegir. El dispositivo cuenta además con una batería de iones de litio que ofrece 45 minutos de foiling por cada carga. Si se quiere doblar esa capacidad, la empresa también propone Fitecell Sport, una batería más grande (y, por tanto, más pesada).
La Flite Air tiene 1,72 m de longitud, mide 69,85 cm en su parte más ancha y pesa 26,9 kg, incluyendo todos sus componentes. Su diseño se corresponde con un uso sencillo para principiantes, pero tiene "capacidad de respuesta y es ágil para pilotos más seguros", según la empresa. Para quien ya conoce el deporte y busca emociones más fuertes, la Flite Air Pro es un poco más corta y estrecha (1,57 m y 64,7 cm), lo que permite reducir su peso un par de kilos.
"Flite Air es ideal para usar dentro y fuera de embarcaciones, muelles, playas rocosas o para aplicaciones escolares y de alquiler", dijo David Trewern, fundador y CEO de la empresa, en un comunicado de prensa. "Compatibles con la mayoría de los productos Flite, las tablas pueden ser utilizadas incluso por profesionales como una alternativa duradera y ligera a nuestras tablas de fibra de carbono".
Su precio parte de los 6.995 dólares (unos 6.500 euros al cambio), bastante más asequible que el de sus 'hermanos mayores' de la gama premium de Fliteboard, que empiezan en 9.695 dólares (unos 9.000 euros). Tanto Flite Air como Flite Air Pro ya están disponibles para su compra a través de la web de Fliteboard, y los envíos comenzarán a partir de mayo.
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