La industria de los yates de lujos ha evolucionado considerablemente en los últimos años, donde las embarcaciones se han convertido en auténticas obras de diseño y tecnología. Hasta algunas se pueden ver durante el verano en los mares de España. Ejemplo de ello son Colossea, cuya cabina de mando se convierte en un dirigible, o EXO-X, un megayate para explorar el océano desde un observatorio emergente. Incluso existe uno que se transforma en un submarino. La última novedad en el sector viene de la mano de Mirarri: un yate de lujo futurista fabricado en titanio y con una gran cúpula de cristal.

Enata, un grupo internacional con sede en Emiratos Árabes Unidos, se ha asociado Mirarri, una nueva marca de yates de lujo liderada por Rashed Al Shaali, de Enata Marine. Una colaboración de la que nace un nuevo yate de alta gama ideado por el diseñador Timur Bozca que destaca por ofrecer un aspecto futurista con una gran cúpula de cristal, inspirada en las estructuras óseas de las aves. Una cubierta semitransparente que permite a los pasajeros ver las vistas panorámicas del exterior y que ofrece un diseño llamativo.

Una cúpula de cristal que también aporta integridad estructural a la superestructura de vigas completas de fibra de carbono y titanio del vehículo acuático. Incluso también ofrece un amplio espacio interior para que los invitados puedan estar de pie y moverse mientras están a bordo de este yate de lujo. Una embarcación que está fabricada en fibra de carbono, kevlar -fibra de aramida- y titanio para hacer que sea lo más ligero y robusto posible.

Este primer modelo de yate de lujo de Mirarri tiene 17 metros de eslora y ofrece un diseño elegante y futurista, que combina con materiales de alta tecnología. Gracias a ello la embarcación deja un entorno a bordo que evoca amplitud, con entretenimiento disponible al aire libre hasta escenarios abiertos en los dos extremos del barco. Mientras que en la cubierta de popa hay un espacio para hacer una barbacoa y un bar, que es ideal para realizar cenas al aire libre o para reunirse con amigos.

En cuanto al interior, este yate de lujo ofrece un salón espacioso con unos sofás o bancos acolchados que se inclinan hacia la cubierta de popa y que permiten a los invitados socializar y sentarse unos frente a otros; por lo que también deja más espacio para moverse. Un salón que cuenta con una mesa desplegable y que se puede usar para comer o trabajar, y con un televisor de pantalla grande para ver películas o series.

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Una de las grandes novedades del primer yate de Mirarri es que vendrá con el software Wingman, que permite al propietario de la embarcación controlar a distancia varios aspectos de la embarcación. Por ejemplo, puede ejecutar diagnósticos a distancia, llevar a cabo tareas de mantenimiento preventivo o realizar actualizaciones. Además de esto, el barco viene con dos camarotes completamente equipados y con elementos de diseño contemporáneo. Se espera que este yate, que ya está en construcción, se entregue en 2025.