Las casas impresas en 3D han llegado para quedarse, aunque de momento no estén extendidas en España. Ya se pueden ver el mercado desde revolucionarias casas que cuestan menos que un coche hasta casas de hormigón que se construyen en apenas 26 horas. Ahora, se ha dado inauguración a la considerada como la primera casa impresa en 3D en Asia central, pensada específicamente para soportar condiciones extremas.
Así lo asegura BM Partners, firma que asegura no solo ser la primera empresa de impresión 3D para la construcción de casas en la zona de Kazajistán, sino que ha completado su primer proyecto de casa impresa en 3D. La edificación se ha levantado en la zona de Almaty, y destaca por ser una propiedad capaz de soportar terremotos de magnitud 7 en la escala de Richter.
Tiene unas dimensiones de 100 metros cuadrados y la empresa se jacta de haberla construido en apenas 2 meses, siendo las paredes el elemento menos problemático de levantar. Tanto es así, que BM Parters explica que consiguieron levantar estas paredes en apenas 5 días mediante impresión 3D.
Una casa hecha en 3D que soporta terremotos
La zona de Almaty se considera como un lugar con cierta actividad sísmica, lo que da lugar a episodios de terremotos regulares en la ciudad, tal y como determina la propia escala de Richter. Esto da más valor a la casa, que al levantarse ha sido preparada para soportar estos eventos sísmicos, especialmente los más importantes.
Si bien todo lo que compete al proyecto ha llevado dos meses, el imprimir las propias paredes han sido cosa de apenas unos cinco días. Tanto es así que la constructora dedicó dos días enteros únicamente dedicados a la instalación de un cinturón de vigas sísmicas para cumplimentar los códigos de construcción de Kazajistán. Este es básicamente la parte superior que corona el techo de la casa.
La impresión en 3D se llevó a cabo usando una mezcla de hormigón con una resistencia a la compresión de casi MPa, o lo que es lo mismo, 8.500 PSI. La mezcla se constituye con cemento, arena y grava local que en palabras de la empresa "permite formulaciones de concreto personalizadas adaptadas a las necesidades regionales". En definitiva, BM Partners usó un tipo de hormigón extrafuerte que normalmente se usa para construir puentes y rascacielos; de ahí su resistencia.
Además, la propia casa integra hormigón de poliestireno expandido para hacer de aislamiento térmico debido a las temperaturas de Kazajistán, que pueden alcanzar los 49 grados. Dicho hormigón también tiene efectos positivos en lo que a rendimiento acústico refiere, dando lugar a una casa aislada y silenciosa.
Cuando las paredes se acabaron de imprimir, los constructores simplemente instalaron el mobiliario central y el resto de accesorios, como las puertas, ventanas, etcétera. La rapidez con la que se finiquitó el proyecto es gracias en parte a la simpleza de la construcción, que consta de una sola planta y una distribución basada en un acristalamiento bastante generoso, así como de una sala de estar central que corona su interior.
El portal New Atlas pudo contactar con COBOD, la empresa europea de construcción 3D colaboradora de BM Partners y constató que el coste de esta casa podía ascender a los 20.500 euros. Teniendo en cuenta los precios actuales de la vivienda en España potenciados además por la crisis de inflación actual, este es un precio irrisorio para una casa estándar. Esta, por cierto, fue la misma firma responsable de la casa impresa en 18 horas ubicada en Portugal.