Las costas españolas son un destino obligado para los imponentes yates de los más ricos del mundo. Frente a las mejores playas de este país han fondeado los megayates de personalidades patrias como Amancio Ortega, pero también nombre internacionales como Bill Gates, fundador de Microsoft, que visitó Gijón el año pasado. Ahora le toca el turno a una eminencia en redes sociales, Mark Zuckerberg, dueño de Facebook, Instagram y WhatsApp está de celebración en Mallorca.

Los 118 metros de eslora del Launchpad, el megayate de Zuckerberg, no son fáciles de ocultar, menos aún el helicóptero que lleva al magnate y su familia hasta el mismo. Durante la semana pasada, según fueron testigo los medios locales, se realizaron maniobras con el helicóptero y el yate de soporte, provocando un fuerte ruido en la costa. 

Lejos de las miradas de curiosos, el multimillonario ha estado celebrando una reunión familiar, el cumpleaños de su padre, como han compartido en las redes sociales de las que es dueño. Una enorme embarcación que cuenta con todo lo necesario para pasar unas vacaciones de lujo sin pisar la costa.

Según informa el Diario de Mallorca, el magnate ha decidido fondear en el nuevo dique exterior del Club de Mar en la capital de Mallorca. Al yate se le ha visto tanto en el puerto de Palma como frente al Caló des Monjo, donde estos días cientos de residentes se han manifestado contra la masificación turística que sufre la zona.

Así es Launchpad

Con una combinación de colores blanco y azul marino, el yate diseñado por la empresa Espen Øino Internacional intenta integrarse en el horizonte marítimo para pasar lo más desapercibido posible. Tarea complicada teniendo en cuenta con un volumen de 5.050 toneladas y 15 metros de manga.

Hace unas semanas, se encontraba frente a la costa de Florida, pero se ha trasladado hasta las aguas del Mediterráneo siendo capaz de alcanzar una velocidad máxima de 20 nudos y una velocidad de crucero de 12 nudos, indica la web SuperYacht Fan. El astillero encargado de su construcción es Feadship, quien indica que es el yate más grande que han creado jamás.

Sus ondas curvas dan la imagen de una bandera azul con ondea al viento. Cuenta con una sala de observación en forma de cápsula y que está completamente cerrada en la cubierta superior. Desde las ventanas de vidrio se pueden tener unas vistas impresionantes del litoral balear.

Por lo que se aprecia en las imágenes publicadas en su perfil de Instagram, Zuckerberg tiene una gran familia. No es un problema, en su yate hay capacidad para 24 invitados y 48 tripulantes, además del personal de servicio. Los invitados disfrutan de jacuzzi, piscina con piso móvil y un espacioso club de playa.

Su compra

Se sabe que la pareja compró el yate por 330 millones de dólares, con esta suma se adquirió tanto el Launchpad como el Wingman, un pequeño yate de 65 metros de eslora que se usa como apoyo del principal.

A diferencia de Jeff Bezos, presidente ejecutivo de Amazon, que encargado su propio yate de vela, construcción bastante polémica y que también ha fondeado en la isla balear, Zuckerberg ha comprado directamente sus dos embarcaciones a sus antiguos propietarios: un oligarca ruso en el caso de Launchpad y el cofundador de la empresa de videojuegos Valve por parte de Wingman.