El agua potable es cada vez más escasa en todo el mundo. El cambio climático, las altas temperaturas y la falta de lluvias son algunos de los factores que han provocado esta situación. Para tratar solucionar este problema, en los últimos años se han presentado una serie de tecnologías con gran potencial, como un tapón que filtra y purifica el agua para que sea potable o una máquina que produce 500 litros al día y sin instalación. La última innovación viene directamente desde España, donde un joven estudiante ha ideado un invento que reduce el consumo de agua en casa en más de un 50%.
Martin Bello Urbez, un estudiante español, ha creado una ingeniosa teja que es capaz de recoger y de almacenar el agua de lluvia para disminuir la dependencia del agua potable en las viviendas y mitigar los efectos de la sequía. Además, este proyecto participa en el reconocido concurso James Dyson Award 2024, uno de los premios internacionales de diseño más importantes del mundo, del que han salido dispositivos revolucionarios.
"Este proyecto es parte de mi Trabajo de Fin de Grado (TFG) de Diseño de Producto, y la idea surge al comparar Valencia, mi ciudad natal, con Bristol (Reino Unido), ciudad donde estudio, ya que en Valencia el agua es un bien muy preciado pero también muy escaso. En cambio, aquí llueve constantemente y, sin embargo, esa agua pluvial pocas veces se aprovecha, y cuando se hace suelen ser en actividades más superfluas, como para regar plantas, por ejemplo. No son sistemas del todo prácticos, ya que se almacena el agua fuera de casa a ras de suelo (water butts)", explica Martin Bello Urbez a EL ESPAÑOL - Omicrono.
Reduce el consumo
Inspirado en las placas solares, las plantas y la manera en la que determinados reptiles como el lagarto moloch captan y filtran el agua en entornos áridos, este joven estudiante ha creado un innovador sistema basado en principios de biomimética, replicando mecanismos naturales para solucionar problemas humanos. "El diseño tiene como objetivo recoger, filtrar y utilizar, de manera eficiente, el agua de lluvia para el entorno doméstico, un sistema autosuficiente que utiliza fuerza potencial y de gravedad. Todo ello, promoviendo la sostenibilidad en el entorno doméstico y reduciendo la dependencia de sistemas de agua centralizados", detalla Bello Urbez.
La teja actúa como el componente principal del sistema y es la que se encarga de capturar el agua de la lluvia, filtrándola mediante un proceso de dos etapas. El primer filtro es el que elimina las partículas grandes y contaminantes, mientras que el segundo se encarga de garantizar que esa agua sea adecuada para su almacenamiento en un depósito modular. Gracias a este enfoque, el sistema se asegura de que el agua que recolecta sea de alta calidad para los usos previstos.
Uno de los aspectos más innovadores es el diseño de la teja, que "está compuesto por tres partes principales. La propia teja, que incluye un primer filtro y recoge el agua pluvial en el tejado; un segundo filtro incorporado dentro de la estructura del tejado y un tanque de agua, que es modular, pudiendo variar el volumen de este en función del uso de agua que tenga la casa". Martin Bello Urbez aclara que la teja tiene "la medida estándar de una teja plana, permitiendo que se acople sin ningún problema en el tejado. El segundo modelo, que es el doble de ancho, cubre una mayor área, ocupando el tamaño de dos tejas estándar".
En la superficie exterior, la teja cuenta con una rejilla "que hace de primer filtro dejando de lado objetos más grandes, como ramas y hojas. A través de esta rejilla, el agua accede a una pequeña cámara que hace de entrada a la estructura del tejado y dirige el agua, dentro de la casa, donde se encuentra el segundo filtro y el tanque, desde donde se suministra a la cisterna". El tercer elemento del diseño es el propio tanque, que tiene un componente central modular "con un volumen de 500 litros". De esta forma, "el usuario puede añadir o quitar volumen, en función del gasto de agua que tenga".
Martin Bello Urbez también apunta a que la estructura de la pieza modular del tanque mide un metro de largo y ancho por medio metro de altura, y "se apila y enrostra al resto de componentes del tanque, siendo ligero y fácil de utilizar". Además, señala que "el diseño incluye elementos como aliviaderos de agua, en caso de desbordamiento, piezas para evitar que entren insectos o roedores y aislamiento térmico para evitar el efecto 'cold-bridge', elementos que no me imaginaba que iban a ser necesarios al principio del proyecto".
En cuanto a la instalación, Bello Urbez destaca que "el diseño, como tal, es adaptativo, por lo que se puede colocar dentro de una vivienda ya construida. Aun así, es verdad que es más fácil planearlo e instalarlo en una casa de nueva construcción. El único requisito indispensable es que la vivienda tenga un tejado y que utilice tejas". La principal ventaja del invento es la reducción del consumo de agua en una vivienda en hasta un 51%.
"Sorprendentemente, gran parte del consumo de agua dentro de una casa no requiere de agua potable. Se puede tirar de la cadena y lavar la ropa con agua de lluvia, siempre que sea adecuadamente filtrada y tratada. De esta forma, se reduce el consumo de agua y se reutiliza la que obtenemos de manera natural", detalla Bello Urbez.
Mejorar el dispositivo
En la actualidad, existen una variedad de proyectos similares, que tratan de reducir el consumo de agua en los hogares. Sin embargo, la teja ideada por Martin Bello Urbez cuenta con una serie de características que la hacen única. Por ejemplo, el joven estudiante indica que "al estar situada en la parte superior de la casa, utiliza energía potencial y gravedad para filtrar y distribuir el agua, sin necesidad de usar ninguna bomba o suministro de energía extra. Sorprendentemente, en ideas y diseños similares, la energía que se usa para filtrar y distribuir el agua tiene, en conjunto, un impacto negativo".
Por otro lado, Bello Urbez explica que su intención a la hora de desarrollar este proyecto "era crear una forma fácil y efectiva de reutilizar el agua de lluvia, y creo que al introducirlo en la estructura de la casa el usuario puede aprovechar este recurso natural de forma automática y casi inconsciente, sin tener que añadir ningún paso extra". Eso sí, reconoce que el proyecto actualmente "está aún en pañales", tras un año de investigación previa y desarrollo de prototipos con "muchos detalles por limar, y campos que me gustaría explorar".
Bello Urbez destaca que, aunque ha tenido oportunidad de hablar y de recibir ayuda por parte de diferentes profesionales, "el proyecto está desarrollado únicamente por mí, y he tenido que conciliarlo con otras asignaturas, prácticas laborales y vida personal. Aun así sigo motivado y me encantaría poder acabar produciendo esta y otras ideas en un futuro no muy lejano. Siento que este proyecto es mi carta de presentación en el campo del diseño". Su innovadora teja ya ha sido ampliamente reconocida, obteniendo el premio Panasonic Design Impact Award y siendo candidato a los galardones del Royal Society of Arts, Student Design Awards, cuya entrega se celebrará a final de año.