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Los robots están presentes en España y en todo el mundo. Unas máquinas que con el paso del tiempo han ido evolucionando para poder realizar tareas de todo tipo. Por ejemplo, existe uno que limpia los cristales de un rascacielos de Nueva York y que trabaja tres veces más rápido que un humano u otro que es más preciso que los dentistas gracias a la inteligencia artificial (IA). Mientras que ahora se ha visto a un robot tocar el violonchelo de forma precisa durante un concierto con una orquesta sueca.

Desarrollado por el investigador y compositor Fredrik Gran, este robot está formado por dos brazos robóticos industriales hechos con piezas en 3D y ha sido capaz de actuar y tocar junto con los miembros humanos de una orquesta en Suecia. Un dispositivo que no se basa en herramientas de inteligencia artificial, sino que se programó usando la partitura musical del compositor Jacob Mühlrad, escrita especialmente para esta máquina.

"Siempre veo la orquesta como un organismo, un instrumento colectivo, así que tenía mucha curiosidad por saber cómo reaccionaría ante un solista robótico. Se creó una interesante simbiosis entre los elementos humanos y robóticos, que resultó, para mí, una unidad fascinante. El jueves pasado, en mi concierto retrato con la Orquesta Sinfónica de Malmö, actuó por primera vez el primer violonchelo solista robótico del mundo con una orquesta sinfónica", ha comentado Mühlrad al medio Malmolive.

El compositor ha destacado igualmente que, cuando vio al robot violonchelista, le pareció un regalo y que era una oportunidad de experimentar muy divertida. Una de las principales características de esta máquina es que tiene una estructura atómica diferente, según ha indicado Mühlrad. "Es una exploración apasionante de cómo se puede tocar un violonchelo basándose en condiciones distintas a las dimensiones de la mano", ha señalado.

Mühlrad también ha declarado que trabajó con dos brazos robóticos industriales que podían tocar el violonchelo y pensó que era algo reamente interesante, ya que en la actualidad hay pianos que se tocan solos. "Pero el instrumento de cuerda es tan intrincado, así que tenía mucha curiosidad por saber cómo funcionaba realmente. Y le pregunté si el violonchelo robótico se había tocado antes con una orquesta, y no había sido así", ha explicado el compositor.

Las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías y un violonchelo robótico "son infinitas", y es que el compositor ve a esta máquina como una herramienta de la que la gente "puede aprender, una exploración de dónde están los límites de lo que se puede hacer con un violonchelo. No es que la nueva tecnología pueda desafiar o sustituir a un violonchelista humano".

Este robot se estrenó en un concierto en Suecia, siendo la primera vez que una máquina de este tipo actúa con una gran orquesta sinfónica ante el público. "Ha sido muy emocionante atreverme a mantener la sencillez. Así que en esta pieza en concreto, he optado por crear música que también se siente emocional, lo que también se convierte quizás en una paradoja por el hecho de que sea en realidad un robot el que la toca", ha señalado Mühlrad en referencia sobre lo que escribió específicamente para el robot violonchelista.