Con la llegada del otoño comienzan a bajar los termómetros para progresivamente ir dando la bienvenida al invierno y esto implica comenzar a tener que lidiar con el frío propio de esta época del año. Para poder combatirlo y disfrutar del máximo confort en el interior de la vivienda es posible recurrir a distintos sistemas, a los que hay que sumar el nuevo radiador eléctrico de Carrefour, que es ultrafino, ligero y compacto.

Estamos hablando de su nuevo Radiador Convector WiFi Ecode EcoWarm, que se vende en tres modelos diferentes en función de su potencia (710 – 1000W, 715 – 1500W y 720 – 2000W), y por un precio que parte de los 94,90 euros y que alcanza los 99,95 euros en el caso del modelo más caro, siendo de esta manera opciones asequibles para combatir el frío.Se trata de un radiador eléctrico convector de bajo consumo fabricado en cristal de alta calidad que es capaz de calentar con una gran rapidez estancias de entre 10 y 20 metros cuadrados en función del modelo elegido, con una temperatura constante para poder mantener en todo momento el máximo confort.

Dispone de dos potencias entre las que elegir para poder elegir en cada momento la deseada según las necesidades, además de ofrecer un control de la temperatura eficiencia a través de la autogestión para poder regular la misma entre los 5º y los 40ºC. Una de sus características más interesantes es que se trata de un modelo que dispone de conexión WiFi, por lo que se puede controlar desde la aplicación (disponible para Android e iOS), que junto a su pantalla y display táctil ofrece un panel de control de uso fácil e intuitivo.

El Radiador Convector WiFi Ecode EcoWarm es programable las 24 horas del día los 7 días de la semana, de forma que se puedan elegir las horas de encendido y apagado del radiador para poder gestionar de la manera más eficiente posible la emisión del calor, garantizando el máximo confort en el interior de la vivienda en todo momento.

Su diseño ultrafino, ligero y compacto lo hace ser un modelo ideal para cualquier hogar, puesto que se puede transportar con gran facilidad de una estancia a otra según las necesidades, teniendo la posibilidad de utilizarlo con patas o bien fijarlo directamente a la pared. Para mayor seguridad, dispone de un sistema de apagado automático para evitar sobrecalentamiento y es apto para su uso en baños gracias a su certificación IP24 que lo hace ser resistente a salpicaduras y humedad.

Convector, radiador o emisor térmico: ¿Cuál es mejor?

Cuando hablamos de un convector eléctrico estamos hablando de un sistema de climatización que se encarga de calentar el aire mediante una resistencia eléctrica, lo que hace que sea un principio similar al del radiador eléctrico convencional, si bien en este caso tiene una forma de transmitir el calor muy diferente, puesto que no tienen un sistema de fluidos sino un ventilador. Para calentar el aire recurre a la corriente, que aumenta la presión y hace lo propio con la temperatura.

El convector acumula calor en su resistencia para posteriormente distribuirlo por la habitación, y como el aire caliente pesa menos que el frío, el flujo de aire caliente se distribuye con mayor eficiencia por la habitación.

Este tipo de aparatos tienen la principal ventaja de que emiten el calor de forma rápida, siendo ideales para calentar estancias pequeñas en apenas cuestión de minutos, si bien tienen la desventaja de que no acumulan calor, por lo que una vez que se apagan descenderá rápidamente la temperatura de la habitación, siendo este el motivo por el que no están indicados para utilizarlos durante largos periodos de tiempo, pues podrían disparar el consumo de energía.

Por su parte, el radiador eléctrico es un aparato que cuenta en su interior con un circuito con un fluido que, por lo general, es agua o aceite, que se calientan a una temperatura alta al entrar en contacto con una resistencia eléctrica, recorriendo el interior del aparato para acumular calor en el mismo.

Este sistema permite que todo el radiador se caliente por igual, emitiendo un calor que incrementará la temperatura en la habitación en la que se coloque, si bien no acumulan el calor de forma tan eficiente como los emisores térmicos. A su favor, cuenta con que consumen menos energía que emisores térmicos y convectores.

Por último, hay que mencionar a los emisores térmicos, que carecen de ventilador y de fluidos, por lo que se diferencian de los anteriores. En su lugar, disponen de una resistencia que se calienta mediante la energía eléctrica y placas de aluminio o cerámico que permiten una gran acumulación de calor.

Su principal ventaja es que son los mejores acumulando calor, de manera que seguirán calentando la habitación incluso tras apagarlos, pero también consumen más energía que un radiador.

Para determinar cuál es la opción que más te conviene, es necesario conocer las características de cada uno de ellos, siendo los emisores térmicos la opción ideal para quienes quieran ahorrar energía mes a mes, aunque la inversión inicial es superior a las otras dos opciones mencionadas. Sin embargo, si se tiene un presupuesto más ajustado y se desea que el tiempo de calentamiento se reduzca lo máximo posible y sea cuestión de pocos instantes que esté caliente la estancia, habrá que decantarse por el convector.