Publicada

El salto a la movilidad eléctrica en España es cada vez más urgente para poder cumplir con los ambiciosos objetivos de sostenibilidad marcados por la Unión Europea. La meta de tener 5,5 millones de vehículos eléctricos en nuestro país en 2030 parece todavía muy lejana, y las dudas de los usuarios sobre la verdadera autonomía de los vehículos y la escasez de puntos de carga están lastrando las cifras de ventas. En el horizonte, sin embargo, se atisba con cierta esperanza lo que pueden aportar soluciones como el ingenioso panel solar que aumenta la autonomía de cualquier coche eléctrico del mercado.

Los avances en la energía fotovoltaica pueden cambiar por completo el sistema de recarga de los vehículos eléctricos, y por eso científicos y fabricantes trabajan desde hace años en la integración de los paneles en la carrocería de los coches. La compañía que quiere dar un paso definitivo en ese sentido es Mercedes-Benz, que acaba de presentar en su sede de Stuttgart sus "innovaciones pioneras para el coche del futuro". Entre ellas, una de las más destacadas es una nueva "pintura solar", tan delgada como flexible, que puede sumar hasta 20.000 km anuales a la autonomía de los automóviles eléctricos en los próximos años.

"La fuerza innovadora ha sido y es uno de los motores más importantes de Mercedes Benz. Nuestra marca lleva dando forma al progreso automovilístico durante casi 140 años con tecnologías pioneras. Para nosotros, la innovación tiene sentido si ofrece a nuestros clientes un auténtico valor añadido", aseguró Markus Schäfer, director de Tecnología, Desarrollo y Compras en Mercedes-Benz Group AG, en un comunicado de prensa.

Pintura solar

En la "visión exclusiva de las actividades de investigación y las tecnologías del futuro" presentada por Mercedes, además de un nuevo sistema de frenos integrados en la unidad motriz o el desarrollo de materiales biodegradables para los interiores, la denominada como pintura solar atrajo todas las miradas.

La información proporcionada por el fabricante alemán sobre cada una de estas innovaciones es bastante escueta, pero permite entrever sus planes para incorporar todo tipo de avances tecnológicos en los coches eléctricos de los próximos años. Y ahí es donde estos "módulos solares innovadores" destacan por encima del resto.

La pintura solar de Mercedes para aumentar la autonomía de los coches eléctricos

A diferencia de los tradicionales paneles de silicio que todos conocemos, este desarrollo de Mercedes integra la capacidad de generar energía a partir de la radiación solar en una "pasta fina como una oblea" de sólo 5 micrómetros, un grosor inferior al de un pelo humano.

Así, se podrá aplicar en cualquier color a todas las superficies exteriores de un vehículo, "independientemente de su forma y ángulo de inclinación". El objetivo es que no haya ni una costura visible en la carrocería, por lo que serían indistinguibles de los coches 'normales'.

La energía obtenida podría alimentar directamente el motor eléctrico o acumularse en la batería de alto voltaje para su uso posterior. "El sistema fotovoltaico está permanentemente activo y también genera energía cuando el vehículo está apagado", señalan desde Mercedes. 

El recubrimiento fotovoltaico desarrollado por el departamento de I+D de la compañía es un "tipo completamente nuevo de pintura a base de nanopartículas" que, según sus responsables, deja pasar el 94% de la radiación solar y tiene más de un 20% de eficiencia, superior a muchos de los paneles disponibles actualmente en el mercado. También tiene la ventaja de su ligereza, ya que apenas añade 50 gramos por metro cuadrado al coche. 

Mayor autonomía

Según los cálculos de los investigadores, un SUV de tamaño medio podría tener una superficie de 11 m2 de pintura solar. Eso supondría un aumento anual de la autonomía de 12.000 km en Stuttgart, 14.000 km en Pekín y 20.000 km en el soleado clima de Los Ángeles.

El clima y los registros de la cantidad de horas de sol de la ciudad californiana tiene similitudes con algunas regiones de España, así que los conductores de nuestro país podrían verse especialmente beneficiados por esta integración de la energía solar en los vehículos.

Paneles convencionales (a la izquierda) al lado de la pintura solar Mercedes-Benz Omicrono

La marca plantea dos ejemplos, en los que se reduciría drásticamente la necesidad de parar a recargar. Según las estadísticas, los conductores de Mercedes en Stuttgart recorren una media de 52 km al día. En caso de que los coches incorporaran la nueva pintura solar, el sistema fotovoltaico se encargaría de cubrir el 62% del trayecto.

En Los Ángeles (EEUU), ese procentaje llegaría al 100%, con lo que se podrían obtener excedentes de energía para 'volcarlos' posteriormente a la red eléctrica doméstica gracias a la carga bidireccional.

Todo eso sin tierras raras ni silicio, usando únicamente "materias primas no tóxicas y fácilmente disponibles", que se pueden reciclar una vez acabado su ciclo de vida útil. Además, su producción sería "considerablemente más barata que la de los módulos solares convencionales". Así, su aplicación en el futuro parque móvil no debería implicar una gran subida de precios para los compradores.

La propuesta, todavía sin fecha de aplicación a vehículos comerciales, se añade a los avances en los últimos años protagonizados por todo tipo de vehículos y proyectos experimentales. El logro más reciente en ese sentido proviene de Aptera, un coche ultraligero de tres ruedas que podría recorrer 1.600 km sin parar a recargar según sus creadores, pero es algo en lo que también están trabajando empresas como Scania para fabricar camiones híbridos con remolques repletos de paneles solares.