Cuando una nueva tecnología irrumpe en el mercado su éxito se confirma con el surgimiento de todo tipo de imitaciones y adaptaciones. La conducción eléctrica o híbrida en los coches ha dado el salto primero a los patinetes y bicicletas que se pueden ver por muchas ciudades de España, y después a los carritos de bebés. Si los ciclistas pueden proteger sus articulaciones con la asistencia eléctrica, las madres y padres también pueden asistirse con esta tecnología a la hora de empujar el cochecito de sus hijos por pendientes o caminos escarpados.
Cuidar de un bebé equivale a varias sesiones de gimnasio al día, al cogerle en brazos y empujar el carrito por la calle. Sin embargo, el esfuerzo no se traduce en mejor forma física, sino en mayor cansancio y dolores musculares. Cualquier ayuda es poca en estos primeros años de vida como la conducción eléctrica en los cochecitos que puede darse en un modelo nuevo y con todo lujo de detalles o mediante un kit para adaptar un cochecito ya comprado.
Algunas familias reciclan los carritos que ya usaron con los hermanos mayores o heredan este vehículo de otras familias que ya no lo necesitan. Poder adaptar cochecitos clásicos a las nuevas tendencias fomentar una economía circular y suaviza el impacto económico que supone hoy en día tener un hijo.
Bosch fue una de las primeras marcas que anunció la integración de esta tecnología en una herramienta tan imprescindible para las familias. Desde entonces, han surgido otras alternativas. Empresas enfocadas en la fabricación de productos para los padres como Cybex, que ha presentado en las últimas semanas su cochecito con asistencia eléctrica que permite subir cuestas y recorrer superficies irregulares sin esfuerzo. En contraposición está este kit de Easy Way.
Por la playa o en cuesta
Por lo general, estos kit capaces de convertir cualquier vehículo en eléctrico se componen de una batería y un motor que activa las ruedas según requiera el sistema para dar mayor o menor asistencia. Desde un control remoto como puede ser el móvil o una pantalla se aplican los ajustes de velocidad y se comprueba el nivel de batería disponible. Esta es también la composición de este producto compatible con la mayoría de cochecitos de bebé del mercado.
El kit Easy- Way consta de una caja central que se compone de dos motores eléctricos de 150 vatios cada uno. Cada motor está conectado a un rodillo de goma que se apoya sobre una de las dos ruedas traseras activando su movimiento sin que nadie tenga que empujar el carrito.
La caja se fija al armazón del cochecito de tal forma que los rodillos estén en contacto con las ruedas traseras. Su creador asegura que la instalación es sencilla y se tarda menos de un minuto en todo el proceso. Dos brazos enganchan el sistema al armazón y con un botón se activa el sistema tras su instalación.
Un control en el manillar en forma de cinta controla los niveles de asistencia eléctrica, mientras que una pantalla muestra información útil como la velocidad y el nivel de la batería. No solo se puede usar para recorridos que impliquen algo más de fuerza para quién conduce el carrito, también para mecerlo y relajar al pequeño mientras el padre o madre están ocupados.
Los otros carritos de bebé eléctricos que han están llegando al mercado ofrece cualidades similares, aunque con la tecnología ya integrada. e-Gazelle S, el nuevo modelo de Cybex, cuenta con una palanca integrada en el manillar para activar el modo de asistencia eléctrica y regular su velocidad o potencia a través de un panel de control que también muestra el nivel de carga de la batería.
El objetivo de todos es ayudar a los padres a mover el cochecito en terrenos complicados como puede ser una cuesta o la arena de la playa por donde las ruedas no giran fácilmente.
Easy-Way integra un control remoto intuitivo que le permite ajustar todas las configuraciones del dispositivo. El mando cuenta con una pantalla de 2 pulgadas donde podrás consultar parámetros como el modo, los niveles de intensidad y la carga de la batería. Este kit se ha diseñado con resistencia a la intemperie, al polvo y al agua con certificación IP65 y prometiendo ser silencioso con solo 70 dB de ruido. Su batería tarda en cargar 4 horas y permite recorrer más de 30 kilómetros con una sola carga, dependiendo de la dificultad del terreno.
Los creadores de Easy-Way lo han lanzado a través de la plataforma Kickstarter en una fase de promoción y por 459 euros de precio, aunque el anuncio se ha cancelado a los pocos días de que acabará la promoción sin dar más detalles. Por su parte, el carrito e-Gazelle S se puede adquirir ya por 1.099,95 euros en la tienda online de Cybex.
Los kits de conversión suelen ser más económicos, pero no siempre cumplen lo prometido o no llegan a un estándar de calidad aceptable. Esto también ocurre con los kits de conversión que transforman bicicletas convencionales en eléctricas y que han llegado a España. En este nicho han surgido dispositivos tan competitivos como CLIP, el innovador invento que convierte cualquier bicicleta en eléctrica en sólo 10 segundos, junto a productos mucho más baratos pero también más complejos de instalar y mucho menos fiables.
La seguridad
La seguridad es parte fundamental de esta tecnología, más teniendo en cuenta su uso en este tipo de vehículos. El kit Easy-Way agrega una función de seguridad que bloquea las ruedas en caso de que se suelte accidentalmente el manillar y la cinta de control, evitando así cualquier riesgo de accidente.
La velocidad de conducción puede aumentarse hasta en cinco niveles, hacia delante y hacia atrás, aunque no indica el límite. Cybex ha marcado la velocidad máxima en 5 kilómetros por hora. Igualmente, basta con dejar de presionar o retener la palanca, para que el motor de este cochecito se detenga. La marca explica que el cochecito se debe utilizar con la correa de seguridad alrededor de la muñeca siempre que se usa en su modalidad eléctrica.
Igualmente, el eStroller de Bosch contaba con una autonomía de 15 kilómetros y sistemas de control para evitar desde robos hasta accidentes; gracias a un freno automático el carrito no se acelera, ni siquiera ante fuertes vientos.