España está siendo testigo de una tendencia que a muchos ha pillado a pie cambiado: la de los robots humanoides domésticos. El caso más famoso es Optimus, el robot humanoide de Tesla que cuidará de los niños y limpiará el hogar. Enfrentado a otros tantos modelos de otras firmas, el robot ha sido objeto de avances importantes pero también de polémicas casi constantes. Una firma china quiere ganar a Tesla en su propio terreno pero optando por la cantidad produciendo cerca de 1.000 robots propios.
Hablamos de Zhiyuan Robotics, una compañía china de robótica que ha anunciado la producción en masa de robots humanoides de uso generalizado y que pretende colocar a un gigantesco número de dispositivos en los hogares. Y es que mientras Tesla, Figure o Boston Dynamics aún están soñando con esta hazaña (Tesla aspira a hacerlo en 2026), Zhiyuan Robotics reveló que está cerca de producir 1.000 unidades para finales de este año 2024.
La firma también apodada Agibot llegó a presentar este verano hasta cinco modelos de robots humanoides distintos, que iban desde modelos humanoides clásicos hasta versiones con ruedas dedicadas a tareas del hogar y equipados incluso con funciones industriales de distinta índole. La compañía tiene claro que desea asaltar los robots de Tesla casi a cualquier precio, buscando competir directamente con la empresa de Elon Musk, según revelan medios locales chinos.
Cerca de 1.000 robots Agibot
Todo comienza no hace mucho, en febrero de 2023 cuando Peng Zhihui fundó la startup Zhiyuan Robotics o Agibot en Shanghái. Pocos meses después en agosto, Agibot lanzó el Raise A1, su primer robot humanoide de uso general. De nuevo, la idea de Agibot era directamente enfrentarse a Tesla, generando un impacto importante en el mercado de los robots humanoides. Poco después ese mismo mes, se presentaron sus nuevos cinco robots.
Uno de ellos es el Yuanzheng A2, un robot bípedo humanoide que mide 1,75 metros de alto y pesa 55 kilos. El South China Morning Post explicó que el robot albergaba no solo un sistema de inteligencia artificial avanzada al estilo Atlas de Boston Dynamics, sino que equipaba sensores que le permitían procesar información visual, audio y texto. Agibot llegó a afirmar que el Yuanzheng 2 podía enhebrar una aguja, haciendo gala de su brutal precisión.
Por otro lado está el Raise A1, el primer robot lanzado por la firma china y catalogado como la joya de la corona de la empresa. En este caso, el Raise A1 se diseñó como un robot industrial, dedicado a aplicaciones puramente empresariales; inspección de vehículos, ajustes en infraestructuras, mover y transportar elementos logísticos como cajas, piezas, etcétera.
Puede alcanzar velocidades de hasta 7 kilómetros por hora, puede manipular cargas de 5 kilos en cada brazo y monta sensores LiDAR, partes modulares fácilmente reemplazables para adaptar el robot a ciertos escenarios y una cámara frontal que básicamente da visión al robot. Cabe aclarar que desde Agibot afirman en su web que el Raise A1 también se adaptará para hacer tareas domésticas en el hogar.
La clave, explica Interesting Engineering, es que Agibot ha anunciado la producción en masa de una gran cantidad de estos robots. Los vídeos compartidos por Agibot muestran procesos de producción en una factoría de Shanghái, llamada Lingang Fengxian. En las imágenes se puede ver cómo se ensamblan los robots, el almacenamiento del inventario con las piezas y componentes, pruebas de rendimiento... los propios robots, eso sí, también participan en estas tareas junto a operarios humanos.
Para llevar a cabo esta tarea, Agibot afirma haber creado lo que ellos llaman una "fábrica de recopilación de datos", que permite a la firma recopilar datos del mundo real (valga la redundancia) con escenarios prácticos para formación de estos robots; las tareas van desde doblar o lavar la ropa hasta organizar elementos del hogar o limpiar superficies. El objetivo es preparar a estos dispositivos para las tareas tanto industriales como domésticas que tendrán que afrontar una vez se adquieran.
En total, la startup habría producido más de 962 robots. Ante la pregunta de por qué Tesla, Nvidia o Figure no han podido producir tal cantidad de robots siendo bastante más grandes, la respuesta es sencilla. Estas empresas, que abarcan otras tantas áreas como la creación de chips o la manufacturación de vehículos, han centrado sus esfuerzos en mejorar las fortalezas de estos dispositivos con modelos de IA avanzados, control de movimiento, fiabilidad y precisión, etcétera.
No obstante, la cantidad de información que las plataformas públicas de Agibot presentes en Internet proporcionan es escasa, al menos en comparación a otras empresas. Agibot ya anunció que su Raise A1 costará menos de 200.000 yuanes, lo que al cambio son unos 26.300 euros, pero no hay detalles sobre su comercialización y si acabará exportándose fuera de China.