Llega el verano y con él los viajes a bordo de los yates de lujo que poseen los bolsillos más acaudalados de España. Entre los personajes que ya se han lanzado a surcar los mares se encuentra Marta Ortega, presidenta de Inditex a bordo del Grizzle, y el tenista Rafa Nadal. Este último ha sido visto a bordo de su nueva embarcación en aguas mallorquinas antes de partir hacia el Máster 1000 de Montreal (Canadá).
[El nuevo yate de Fernando Alonso: híbrido, con paneles solares y aspecto futurista]
El tenista encargó el catamarán Great White a la marca Sunreef Yatchs con sede en la ciudad polaca de Gdansk hace ahora 3 años. El diseño exterior de la embarcación no fue realmente un secreto durante la construcción, pero la cosa cambiaba sobre el interior con tan solo unas pocas fotografías hechas por el propio fabricante de yates.
El amigo y expiloto de Fórmula 1 Nico Rosberg fue el encargado de mostrar al mundo todos los pormenores internos del barco. Rosberg, cuya amistad con el tenista español viene de hace años, grabó un vídeo en el que Nadal actuaba como buen anfitrión. En el metraje, de unos 16 minutos, se pueden observar detalles como la terraza en la cubierta inferior o una sala con una mesa de ping-pong.
La elección de un catamarán en lugar de un barco monocasco no ha sido puro azar. Son embarcaciones mucho más manejables, estables y rápidas que las naves monocasco si se comparan con esloras similares. También el precio de compra y el coste de amarre es mayor, al ocupar más metros de ancho que el resto de embarcaciones. Aunque donde de verdad se ve el factor diferencial es en el diseño interior.
Los 24 metros de lujo
El modelo elegido por el tenista de Mallorca es el Sunreef 80 Power, uno de los catamaranes estrella del fabricante polaco y ha sido bautizado como Great White. El encargo se materializó el pasado verano cuando la propia Sunreef publicó imágenes de Rafa Nadal a bordo de su flamante barco.
"El Sunreef 80 Power es un yate multicasco universal para cruceros de largo radio con la máxima comodidad", según lo describen en la página web oficial. "El caso y la superestructura dinámicos del yate extienden los espacios habitables al extremo, ofreciendo infinitas opciones para el diseño y la decoración personalizados".
Este último extremo es, probablemente, uno de los más importantes para cualquier millonario que se compra un yate. La personalización y el diseño interior (el exterior ya es más complejo) son las señas de identidad y lo que diferencia unas embarcaciones de otras de su mismo modelo.
Los 24 metros de eslora por 12 de manga del Great White se transforman en unos 370 metros cuadrados de espacio interior habitable, siendo uno de los más amplios de su clase. El camarote principal es el centro del yate donde se ha instalado un televisor anclado al techo y abatible sobre la cama, un vestidor, un gran sofá y un balcón.
La embarcación tiene espacio disponible para alojar hasta 8 personas en 3 cabinas, entre las que se incluye la suite de Nadal, y camarotes para la tripulación. Aunque, verdaderamente, el espacio más importante es el gran salón central como punto de encuentro de todos los huéspedes. Tiene capacidad para 8 personas e incluye un par de televisores de más de 70 pulgadas.
Ya en el exterior, el Great White tiene un cenador al aire libre en la zona de la popa -con televisor incluido- y un solárium donde los huéspedes pueden usar las tumbonas. En un segundo espacio, también en la popa, se encuentra la zona de baño desde donde tener acceso directo al agua cuando el barco esté fondeado.
En cuanto al resto de especificaciones, el Great White cuenta con un par de motores que desarrollan 1.200 caballos de potencia cada uno que impulsan al barco a una velocidad máxima de 24 nudos con 14 nudos de crucero.
Su anterior yate
Antes de elegir un catamarán, Rafa Nadal había apostado por un yate monocasco con una apariencia mucho más discreta. El Beethoven fue su embarcación de recreo desde que lo adquirió -nuevo- en 2016 y hasta 2019, cuando se puso a la venta por 2,6 millones de euros. Aunque se estima en que el precio de adquisición final fue sensiblemente menor.
El Beethoven es un encargo al astillero italiano Monte Carlo Yatchs por unos 3 millones de euros de puro lujo. También con 24 metros de eslora, este yate -que finalmente se lo ha quedado una familia mallorquina- cuenta con dos cubiertas en las que se encuentran un par de salones, la suite y los camarotes. Todo ello con espacio para 8 personas, igual que el Great White, y las comodidades propias de cualquier barco de lujo.