La reunión entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez en Moncloa celebrada este miércoles para buscar un posible pacto de gobernabilidad ha sido un fracaso. La negativa rotunda del líder socialista a facilitar, no ya la investidura de Rajoy, sino cualquier acuerdo en el que esté presente el PP, deja muy pocas posibilidades para configurar una mayoría política estable.
La postura del líder del PSOE hace inviable, por ahora, una alianza PP-PSOE-C's, solución que planteó EL ESPAÑOL inmediatamente después de las votaciones y que ha tenido recorrido. Primero fue la plataforma Libres e Iguales la que se mostró partidaria de esa alternativa, y Albert Rivera -antes de la reunión entre Rajoy y Sánchez en Moncloa- y Alberto Núñez Feijóo -tras conocer su resultado- han convenido en auspiciarla. Tal y como admiten el líder de Ciudadanos y el presidente gallego, ese acuerdo a tres bandas daría estabilidad al país, permitiría abrir una legislatura de reformas y sería determinante para frenar el proceso independentista iniciado por la Generalitat.
Malestar en el PSOE con Sánchez
Podría ocurrir, de cualquier forma, que la posición de partida de Sánchez, refractaria al tripartito, cambiara en los próximos días por presiones internas. Y es que, descartado el PP de cualquier alianza, a los socialistas sólo les quedaría echarse en brazos de Podemos, una opción que rehúyen los principales barones del PSOE, empezando por la todopoderosa Susana Díaz. En ese sentido, el malestar en el seno del partido con el secretario general ya es palpable.
Hay que tener presente, además, que de mantenerse el actual estancamiento no habría más remedio que ir a nuevas elecciones. En la práctica, esos nuevos comicios se convertirían en una segunda vuelta, que radicalizaría las posiciones en beneficio de Rajoy y Pablo Iglesias.
Feijóo, contra los personalismos
Lo cierto es que, en los términos en que está planteada ahora mismo la situación, Rajoy y Sánchez son los grandes obstáculos para encontrar una salida que sería realmente beneficiosa para el país. Por eso Feijóo ha dado en el clavo al pedir "esfuerzos" en su partido para entenderse con el PSOE y poner el énfasis en que "se equivocan" quienes "creen que lo prioritario es su futuro político".
Un gesto de acercamiento a los socialistas debería ser el de ceder la presidencia del Congreso a uno de sus diputados. Carme Chacón sería una excelente candidata de consenso, como podría serlo también Patxi López. Sería el primer paso para recorrer el camino que desembocara en una gran mayoría. Un acuerdo que, como acertadamente defiende Libres e Iguales en un comunicado, comprometa a los tres partidos y no se limite "a la formación de mayorías erráticas al compás de las circunstancias". Se trata de un reto por el que merece la pena unirse y trabajar.