Lo mejor de Torra es que es entrañable y plurilingüe y habla por boca del Redentor. Si el Rey citó a Cataluña mientras yo chupaba la gamba por la glándula pineal, el honorapla nos citó el Canto de la Sibila. Anexionarse algo por la vía de lo poético es algo que llevamos haciendo en Castilla desde que Alfonso X -y años después Lorca- vio que lo lírico sale mejor cuando se mira hacia afuera.
Torra, lo que es Torra, mira hacia afuera y los lupos no se le empañan cuando se saca el gazpacho de los Países Catalanes ahora que Rufián apunta a ministro del Interior, de Cultura o incluso seleccionador nacional como me dice Raúl Zoldyc, estalinista domesticado.
La mirada se nos va al concierto de sant Esteve del Palau de la Música, pero Tsunami tiene ya compradas las entradas y en eso consiste el tiempo nuevo que ha de venir el 20. Del Orfeó o de los orfeones han salido grupos como El Consorcio, y por eso celebramos que los CDR se alfabeticen con las cosas y las causas del teatro lírico.
Lo mejor de Torra es que se puso en el lugar de Jesucristo, que ni el Longinos. Quim Torra es un Pentecostés de las miasmas del fugado @KRLS, pero Quim quiere dejar su sello con su imperialismo polaco y sus visitas a la Wikipedia a ver qué decían sobre la cosa Berenguer o March, entre la política la poética y la diarrea.
La rabieta de Torra es el canto de la pluriEspaña sanchista que quiere ser gamberra cuando lo tiene todo y no se conforma. A Torra lo mantienen las bestias con forma humana que, como él, nacieron en Iberia vieja y se ciscan en el terreno o hasta en el útero materno según nos contó Freud y nos confirmó, con apéndices, Jung.
Con todo, conviene resaltar que el arreón de Torra fue antes de san Esteban Protomártir, patrón de los canelones, con las flatulencias vernáculas que vienen derivadas de los días grandes como saben los más cafeteros de la independencia.
A Torra habría que hacerle cada festividad un pantallazo. Igual que a Sánchez y a Ribera, ministra de los girasoles, que también habría que recordarles que el solsticio no es cuando ellos quieren, sino cuando manda la Naturaleza. También habría que mandar este mensaje al periódico sobaquero, sí, cuando nos vienen en festivos con esa cojonada de expulsarnos del Calendario Gregoriano por sacar pecho y línea editorial.
Hoy la foto que sale es la que hay, pero podríamos gastar un carrete y todos los datos en sacar instantáneas de Torra en los días de guardar. Torra es fiel a las tradiciones: pasarse la JEC por el Arco del Triunfo y saber que te inhabilitarán en un futuro es todo uno.
Torra es solista de las cantatas beaturronas, Torra es nuestro Jesucristo Superstar con dioptrías, Torra es pascuero del Orfeó, es octavilla de Juan Carlos Aragón. Un hombre pegado a su destino y a su causa.
Un Torra en cada casa es la Navidad que nos desean Pdr y Bgña.
Ea...