Sobre la candidatura de Bal, el machismo selectivo de la izquierda y Polonia
Edmundo Bal pone patas arriba Ciudadanos con su voluntad oficializada de sustituir a Inés Arrimadas como número uno del partido. Los insultos del presidente del PSOE andaluz a Isabel Díaz Ayuso demuestran la doble vara de medir de la izquierda cuando se trata de ataques a mujeres de la derecha. Y la existencia de un cuerpo oficial de civiles con formación militar en Polonia demuestra el compromiso del país en la defensa de la libertad y la democracia, amenazadas por el imperialismo ruso.
Ciudadanos, un proyecto que merece sobrevivir
Durante meses, se especuló sobre los nombres que se posicionarían en Ciudadanos para desafiar el liderazgo de Inés Arrimadas, la única candidata no nacionalista ni socialista que ha ganado unas elecciones en Cataluña. Finalmente, será Edmundo Bal, su número dos, quien presentará batalla para ofrecer un proyecto alternativo.
A simple vista, el sorprendente movimiento no parece la mejor noticia para una formación que pasa por dificultades y que, según las encuestas, corre el peligro de desaparecer en la próximas elecciones generales. Al mismo tiempo, es evidente que Ciudadanos necesita un viraje que lo posicione, de nuevo, entre las preferencias de los españoles.
Lo que ningún votante moderado negará es que el pobre estado de salud de Ciudadanos, el único partido verdaderamente liberal de España, es un inconveniente en un país dominado por la crispación y los populismos, y necesitado de puentes. Ciudadanos es un proyecto que merece sobrevivir y, con Arrimadas o Bal, recuperar la confianza de quienes depositaron en los liberales las esperanzas de reformas y cambios para el país.
El machismo selectivo de la izquierda
Que el presidente del PSOE andaluz, Manuel Pezzi, se lanzara al insulto de los políticos del PP no es noticia. Tuvo palabras desafortunadas para Alberto Núñez Feijóo y Juanma Moreno, y también las ha tenidp para Isabel Díaz Ayuso, a la que se refirió ayer como una "tarada mental".
Sorprendentemente, este insulto no ha propiciado una salida en masa de las bancadas progresistas para denunciar el machismo del ataque a una mujer. Lo que contrasta, en definitiva, con la reacción y el cierre de filas en torno a Irene Montero tras el desprecio que sufrió por parte de una diputada de Vox.
Parece claro que en España existe una doble vara de medir. El machismo debería ser despreciable por sí mismo y no en función de la persona afectada. O todo es machismo o nada lo es. Tampoco se ha oído crítica alguna por banalizar un trastorno psicológico en tiempos en los que la salud mental apenas tolera bromas.
Esta clase de salidas de tono confirman una realidad incómoda para el progresismo. Las mujeres de derechas son la coartada para el machismo de muchos hombres de izquierdas. Pezzi es el ejemplo.
La defensa de la libertad empieza en Polonia
Hoy publicamos en EL ESPAÑOL un reportaje sobre las Fuerzas de Defensa Territorial de Polonia, fundadas en 2017 para formar a los civiles que quieran recibir instrucción militar. Es muy probable que, en España y otros países occidentales, la idea suene extraña. Incluso puede que existan prejuicios que vinculen estas milicias a grupos extremistas o nacionalistas. Pero, nada más lejos de la realidad, pues son la respuesta a la amenaza que el pueblo polaco siente por la beligerancia de la Rusia de Putin.
No es fácil de comprender en un país como España carente de enemigos claros y beneficiado por sus fronteras naturales. Pero desde el punto de vista de los vecinos de Rusia, especialmente Polonia y los bálticos, cobra todo el sentido. De hecho, la creación de las Fuerzas de Defensa Territoriales fue una maniobra inteligente del Gobierno polaco para asumir el control de los civiles armados y evitar el surgimiento de grupos paramilitares descontrolados.
Lo que demuestra la existencia de este cuerpo es que el polaco es un pueblo que comprende el valor de la democracia y de la libertad después de un siglo lleno de penurias y de sometimiento al yugo nazi y soviético. Europa Occidental tiene lecciones que aprender del Este. Entre otras cosas, que nuestro modo de vida no está garantizado y que la civilización debe ser defendida activamente.
*** El Merodeador es el seudónimo colectivo de la sección de Opinión de EL ESPAÑOL integrada por Cristian Campos, Jorge Raya Pons y Víctor Núñez.