Parafraseando a Joaquín Sabina, a los madrileños "nos sobran los motivos" para pedir al Ayuntamiento una rebaja del IBI.
Sobran las razones para reducir la carga fiscal en la capital, sobran los porqués para reducir una presión impositiva que asfixia a los madrileños a base de impuestos y tasas.
Porque el Consistorio de Carmena recauda por multas más que todo el presupuesto anual de la ciudad de Burgos, porque se ha multiplicado el IBI por tres en los últimos años, porque en 2017 la mayoría de los madrileños pagaremos más IBI que en 2016; y en 2018 más que en 2017, porque el recibo del IBI equivale al ingreso mensual de muchas familias, porque se ha multiplicado por tres la recaudación por plusvalía en los últimos años, porque en Madrid vive el 7% de toda la población de España y, sin embargo, se recauda el 25% de lo cobrado por plusvalía en todo el país, porque se pueden eliminar muchos gastos superfluos y duplicidades y no se hace, porque la plantilla en el Ayuntamiento de más de 40.000 empleados públicos sigue engordando a base de contratar más asesores, porque se incrementan drásticamente los gastos en subvenciones, porque se ha puesto en marcha una Radio Municipal con un presupuesto de 600.000 euros anuales.
Podríamos seguir detallando centenares de motivos, pero el de más peso aparece, sin duda, cuando llega a casa el recibo del IBI y acto seguido uno sale a la calle y se encuentra con un Madrid muy sucio.
En dos años no se han realizado prácticamente ninguna de las inversiones en las mejoras prometidas por Ahora Madrid, como pavimentación, escuelas infantiles, vivienda pública, centros para mayores y un largo etcétera.
Los portavoces de Podemos nos vienen con el “engañabobos” de que el Ayuntamiento de Madrid tiene un superávit de 1.022 millones de euros y de que amortizan mucha deuda, cuando bien saben que es fruto del sablazo fiscal y de su incapacidad para gestionar y ejecutar obras quedando por ley obligados a amortizar deuda con tipo de interés cero.
Es por ello, por todas estas razones, por lo que afirmamos que es necesario bajar el IBI. Con una buena gestión se pueden reducir los impuestos, aumentar las inversiones, incrementar el gasto social, amortizar gran parte de la deuda y cumplir con el techo de gasto impuesto por Hacienda.
Los madrileños lo tienen más que merecido.
*** Miguel Ángel Redondo es concejal por Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid