El PP renace en Sevilla

Y cuando digo "algo", lo hago con el convencimiento de que todos nos equivocamos, sobre todo cuando tomamos decisiones. Decisiones que, en el caso del PP, nos han encomendado tanto los ciudadanos como los militantes.

Virginia Pérez, presidenta del PP de Sevilla. PP de Sevilla

Esa es la grandeza de la democracia. El poder del pueblo. La igualdad real sin privilegios.

Esa democracia es la que me permite celebrar hoy el primer aniversario del segundo Congreso Provincial al que concurrí como candidata en la organización política más importante, cuantitativamente hablando, de España: el PP de Sevilla.

El aniversario coincide con el Congreso Nacional que acogerá Sevilla esta próxima semana y que hará presidente nacional a Alberto Núñez Feijóo.

En el mismo día y a la misma hora, casi como canta la sevillana, la capital andaluza volverá a ser testigo de la renovación orgánica del partido que apadrinó nuestro Estado de derecho, la Constitución del 78 o las libertades que hacen que España sea el país que hoy es.

Una renovación que también se dio en 1990 (en Sevilla, de nuevo), en el Congreso que hizo presidente a José María Aznar, y con aquel "ni tutelas ni tutías", bajo la batuta del inolvidable Manuel Fraga.

Ahora, 32 años más tarde, toma el testigo como piloto de nuestra máquina Alberto Núñez Feijóo. Y lo hace coincidiendo con el primer aniversario del Congreso Provincial del PP de Sevilla en el que tuve el honor de revalidar la presidencia provincial.

"Es un verdadero privilegio poder representar a mi partido y a su militancia como la única mujer que lidera una provincia en Andalucía, sin designación ni cuota de género alguna"

Gracias a los 1.129 votos de militantes del Partido Popular de Sevilla, tengo la suerte de poder dirigir junto a mis compañeros la política provincial con humildad y con la responsabilidad que exige ejercer cualquier tarea política en los tiempos que corren.

Es un verdadero privilegio poder representar a mi partido y a su militancia como la única mujer que lidera una provincia en Andalucía. Y lo hago por voluntad de la militancia en libre concurrencia en las urnas, y no por designación ni cuota de género alguna.

Coincide esta responsabilidad con el mejor Gobierno que ha tenido Andalucía desde el advenimiento del Estado autonómico. Porque, a pesar de la pandemia, el presidente Juanma Moreno ha sabido gestionar los recursos de los andaluces con diligencia y buen tino, saldando una deuda crónica que había dejado a Sevilla en blanco y negro tras 37 años de socialismo.

¡Qué acertado fue aquel momento en el que solicitamos con humildad el voto "prestado" para demostrar que otra forma de gobernar era posible! Andalucía es la realidad que surge de aquel acierto y a partir del diálogo fluido con todos.

Empezando por nuestras propias filas, donde se viven debates internos que buscan enriquecer los proyectos para hacer de España un país mejor para esta generación y las venideras.

No me cabe la menor duda de que este Partido Popular, con Alberto Núñez Feijóo a los mandos, será otro acierto para España. Acierto al que Sevilla dará a luz en este Congreso Nacional acogido con tanta emoción como ilusiones.

El nuestro es un proyecto de Estado regenerado, con distintas sensibilidades y en el que cabemos todos, con voluntad de diálogo y con un propósito lleno de valores cabales. Con distintas generaciones de mujeres y hombres capaces y reencontrados en una aspiración común e integradora que no puede ni quiere prescindir de nadie.

"El PP es una maquinaria perfectamente sincronizada con un compromiso firme y la voluntad de solucionar los problemas generados en un contexto socioeconómico sin precedentes"

Esa es la esencia de los populares. También la de un proyecto que se renueva en Sevilla este próximo 1 y 2 de abril, con Alberto Núñez Feijóo como conductor de una máquina que no se puede permitir tener piezas disonantes.

La sincronía de ideas nos va a permitir además aprovechar una oportunidad única de dejar a un lado las diferencias y apostar por la unidad. La del PP es una maquinaria perfectamente sincronizada, con un compromiso firme y con la voluntad es la de solucionar de forma decidida los problemas generados en un contexto socioeconómico sin precedentes.

El peor enemigo del socialismo es la realidad, decía Margaret Thatcher. Nosotros debemos levantar esa bandera que nos han dado los ciudadanos con su voto y, cual banderín de salida, usarla en la carrera para sacar a España del pozo de desesperanza en el que se halla.

Después de este Congreso, seremos un equipo veloz, confiable y sin complejos. Sevilla será de nuevo la cuna de la regeneración política moderada el próximo fin de semana.

Estamos preparados.

*** Virginia Pérez es la presidenta del PP de Sevilla.