La Torre de Hércules volvió a mostrar una noche más su cara más solidaria. Este fin de semana, la causa fue el Día Mundial del Ostomizado, a propuesta de la Federación de Municipios y Provincias, con el objetivo de ayudar a reincorporarse a la vida activa a estos pacientes pese a las limitaciones que el proceso conlleva.

Las personas ostomizadas viven con una bolsa pegada al cuerpo para recoger los desechos tras una intervención quirúrgica. Una operación que salva vidas pero tras la cual es necesario aprender nuevas pautas para la vida cotidiana.

Conmemorando este día se busca contribuir a integrar a todos los afectados por esta operación y sensibilizar a la sociedad de las barreras que tienen que superar a diario a estos pacientes.

Un mensaje al que la Torre de Hércules se sumó, iluminándose de verde, para visibilizar a las miles de personas ostomizadas (en España son 125.000) y que quiso "arrojar luz" sobre las demandas de estas personas para mejorar su calidad de vida, como es el caso de los baños adaptados.