La Xunta de Goberno Local de A Coruña autorizará mañana la suspensión del servicio municipal de transporte público por tranvías, con efectos desde el 7 de julio de 2011. Esta fue la fecha en la que la compañía dejó de prestar este servicio a petición de la Administración local tras producirse un descarrilamiento.

El Ejecutivo de Inés Rey llegó a un acuerdo con la compañía y le abonará 489.896 euros, cantidad que se corresponde a los gastos ocasionados por la suspensión del servicio desde el 7 de julio de 2011 hasta el 31 de diciembre de 2019 y la factura por la prestación del transporte entre el 1 de enero y el 6 de julio de 2011.

El ayuntamiento coruñés, por otro lado, recibirá todo el mobiliario, tranvías y objetos existentes en la nave municipal en la que la empresa concesionaria los custodiaba. Este acuerdo supone la desaparición definitiva de los tranvías turísticos en la ciudad herculina, que comenzaron a funcionar bajo el Gobierno de Francisco Vázquez en 1997.