El Concello de Culleredo ha hecho balance de sus gastos extraordinarios en el apartado de emergencia social derivada de la pandemia de la Covid-19. El municipio coruñés ha invertido un total de 1,8 millones en diferentes acciones, dirigidas principalmente al ámbito de los servicios sociales, la protección de la salud y al pequeño comercio.

Este año, aumentó en 400.000 euros el gasto social de los presupuestos de Culleredo, suponiendo un total de 2,9 millones de euros. Prácticamente la totalidad del trabajo en dicho campo se destinó a la lucha contra los efectos de la pandemia: ayuda a domicilio, prestaciones sociales o intervención social.

Las ayudas de emergencia social tuvieron que incrementarse un 20 %, alcanzando los 258.000 euros en este 2020. Los destinatarios principales de estas prestaciones fueron las familias en situación de exclusión para afrontar gastos esenciales como la alimentación, la higiene o el alquiler.

Por otro lado, el Concello incrementó las partidas destinadas a la protección a la salud en 410.000 euros. Se adquirieron elementos de protección como mascarillas, se instalaron puntos de desinfección o se entregaron kits específicos a pequeños negocios y hostelería. Finalmente, en materia de ayudas al pequeño empresario, Culleredo destinó 650.000 euros al plan PEL Reactiva.

José Ramón Rioboo, alcalde de la localidad, avanzó estos días que los presupuestos del 2021 irán en las mismas líneas que los de este año. "La atención social fue siempre nuestra prioridad y ahora lo es más si cabe por los efectos graves de la pandemia", dijo. El regidor quiso destacar la labor de todo el personal municipal durante estos meses.