A CORUÑA, 11 Oct. (EUROPA PRESS) –

Un preso acusado de romperle la mandíbula de una patada a otro interno del centro penitenciario de Teixeiro (A Coruña) que se negó a darle un cigarro niega los hechos que se le imputan y alega que hubo "una trifulca entre otras personas" en la que no participaron ni él "ni el denunciante".

"No sé ni por dónde ha venido el golpe que dice que he causado yo", ha declarado el procesado, durante el juicio celebrado este martes en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña.

El denunciante, por su parte, ha explicado durante la vista que no vio al acusado agredirle porque el golpe "fue por la espalda". En cuanto a las secuelas de la lesión, ha destacado que "todavía hoy" no puede comer. "La boca la tengo deformada", ha añadido.

Según el escrito de la Fiscalía, los hechos ocurrieron el 18 de junio de 2017 sobre las 12:45 horas en la sala de día del módulo residencial número 12 del citado centro penitenciario. Después de que la víctima rechazase darle el cigarro, el acusado, sin mediar palabra, le propinó una patada en la cara.

Secuelas

Las lesiones, tal y como constan en el parte médico que recoge el informe del Ministerio Público, tardaron en curársele un total de 80 días. Tras esta agresión, le quedaron varias secuelas, entre ellas la pérdida completa de un molar.

Por estos hechos, el procesado se enfrenta a seis años de prisión por un delito de lesiones, con agravante de reincidencia. Además, Fiscalía pide que indemnice a la víctima con 13.140,81 euros y al Servizo Galego de Saúde (Sergas) por los gastos derivados de la asistencia sanitaria prestada.