El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, se ha disfrazado este viernes de Jesucristo. Lo ha hecho en la Festa de Entroido, ante las más de 850 personas asistentes, y según ha explicado buscaba parodiar la situación actual a la que le quieren colocar una cruz por el derribo de la Casa Carnicero.

El regidor, con una corona de flores y una cruz a la espalda, recorrió la pista de baile y se dirigió al público desde el escenario. "A cruz que me queren poñer para acabar comigo… porque a ninguén se lle escapa que queren acabar comigo e coa Alternativa dos Veciños. Pero nunca puideron conseguilo, nin tampouco van poder facelo agora", aseguró García Seone.

"Estou en plenitude de saúde, en plenitude de moral e en plenitude de guerra para os que nos queiran atacar", aseveró García Seoane. El regidor aprovechó su intervención, además, para agradecer la asistencia de todos los presentes: "Sen disfraces non hai entroido".

Varias imágenes de Ángel García Seoane caracterizado como Jesucristo (Concello de Oleiros).

Varias imágenes de Ángel García Seoane caracterizado como Jesucristo (Concello de Oleiros).

Varias imágenes de Ángel García Seoane caracterizado como Jesucristo (Concello de Oleiros).

Varias imágenes de Ángel García Seoane caracterizado como Jesucristo (Concello de Oleiros).

La Fiscalía ha solicitado un año y tres meses de prisión para el alcalde de Oleiros por el derribo de la Casa Carnicero. García Seoane también se enfrenta a 12 años de inhabilitación para cualquier trabajo en la administración y al pago de una multa de 50 euros al día durante 18 meses, al mismo tiempo que debería pagar de su bolsillo la construcción del nuevo edificio.

El inmueble, que llevaba en el municipio desde 2016, ardió en el verano de 2020. Las malas condiciones de la estructura de esta histórica casa motivaron al consistorio de Oleiros a tirarla abajo para, según aseguró en su momento, garantizar la seguridad en la zona. Patrimonio, sin embargo, había denegado su demolición, que finalmente se efectuó el 31 de diciembre de 2020 de forma unilateral por parte del concello.