El Caffè Vecchio se despide definitivamente de A Coruña. El que fuera el "Starbucks coruñés" dice adiós definitivamente con el cierre del local que tenía en la calle Real. La cadena de cafeterías llegó a contar con tres locales en la ciudad. Aparte de este, tenía otros dos que se situaban en la plaza de Lugo y en Marineda.
Hace unas semanas aparecía un anuncio de un local en la calle Real que coincidía con el Caffè Vecchio. El precio para hacerse con él era de 400.000 euros de traspaso y 9.000 de alquiler. Dicho anuncio ya no está disponible tras ser dado de baja en Idealista.
El adiós del Caffè Vecchio se puede tildar como la crónica de una muerte anunciada. Anteriormente ya habían cerrado los otros dos locales que tenía en la ciudad. El cierre del establecimiento de la Plaza de Lugo se produjo en marzo del pasado año. El establecimiento lo anunció con un cartel en la puerta en el que señalaban que seguían operativos en la calle Real.
Denuncias de impagos y explotación laboral
Los últimos años del establecimiento han estado marcados por las polémicas con sus trabajadores. En noviembre de 2020 se sucedieron varias protestas tanto en la Plaza de Lugo como en la calle Real, en las que decenas de empleados reivindicaron sus derechos laborales y denunciaron el trato recibido por la empresa.
En este sentido, muchos trabajadores denunciaron impagos, explotación laboral, presiones y ausencia de vacaciones. Los afectados alegaron también "horarios horribles" e hicieron hincapié en que algunos sufrieron sanciones "injustificadas" de empleo y sueldo e "imposibilidad de desconexión durante las libranzas". Sobre el pago de los salarios, argumentaron que las cantidades recibidas" no eran por las que firmaron inicialmente en sus contratos de trabajo". Según los participantes en las protestas, todo ello fue denunciado judicialmente".
Asimismo, los empleados concretaron en su momento que esta situación se produce desde hace años y que no tenía que ver con la crisis derivada de la pandemia. "Lo que pretendemos es que (José María Vecino) deje de tener este negocio y que, si el Vecchio sigue, lo haga con otra persona. Ya no es solo que no pague, es el trato que tiene con los trabajadores", explicaba una de las afectadas a este medio.