Familiares y amigos de Yoel Quispe, el joven que murió apuñalado durante la madrugada de Nochebuena en A Coruña, han secundado una nueva concentración ante los juzgados para pedir "justicia" y que se amplíe la investigación. Los allegados de la víctima se concentraron también el pasado domingo en el Obelisco, donde reivindicaron que "las vidas racializadas importan".
La madre de Yoel, Maritza Yovana Gómez, ha insistido en declaraciones a Europa Press en reclamar que se amplíe el número de investigados. Actualmente, la Policía investiga a tres jóvenes: uno en prisión como presunto autor de un delito de homicidio y otros dos en libertad con cargos.
"Son más", ha sentenciado la madre de la víctima, que señala que con estas protestas buscan que "no caiga en el olvido" la muerte de su hijo. "No fue una pelea, fueron once contra uno", ha sentenciado en línea con los lemas de las pancartas pidiendo "justicia".
La concentración se ha convocado coincidiendo con la declaración de nuevas testificales en esta jornada, en concreto de personas que no estuvieron implicados pero que pasaron por la zona en el momento de los hechos. Además, quedarían nuevas testificales en próximas fechas.
Fuentes del entorno de Yoel insisten en la necesidad de "mucha más investigación" y en que deberían ser más las personas investigadas por estos hechos. "Había gente que se veía en el vídeo que pegaban a Yoel y no están imputados", han argumentado.
Los hechos
Yoel Quispe, de 22 años, recibió una puñalada en el abdomen y otra en el corazón tras una pelea. Los hechos ocurrieron en la confluencia de Juan Flórez con la calle Sinfónica de Galicia durante la madrugada de Nochebuena y gente del entorno del chico apunta a que todo se derivó de una discusión previa en uno de los locales de Palexco, desde donde supuestamente los agresores lo siguieron y acabaron con su vida cuando estaba solo.
La Policía Nacional detuvo a tres personas por el crimen. Para uno de ellos decreto prisión sin fianza, mientras que los otros dos quedaron en libertad. Según informó la Delegación del Gobierno, la persona que permanece en prisión es un joven coruñés de 21 años.