Cáritas inicia su proyecto de vivienda social en A Coruña con el derribo de la capilla de Visma
La organización busca financiación para construir 12 viviendas comunitarias para mayores en el barrio
19 marzo, 2024 12:36Los vecinos de San Pedro de Visma ya han comenzado a despedirse de la capilla del Santo Cristo. La ermita, en desuso, ha empezado a ser demolida por los operarios contratados por Cáritas con el objetivo de construir en esa misma zona un centro de vivienda social para mayores de 65 años.
La directora de Cáritas Diocesana de Santiago, Pilar Farjas, ha informado a este diario que los trabajos de demolición terminarán este mismo mes de marzo. Se trata de la primera fase del proyecto presentado el verano pasado por Cáritas: construir un centro social para mayores de 65 años con dificultades para acceder a una vivienda. El objetivo es construir un edificio con espacio para hasta 12 adultos, así como una vivienda de servicio.
Una vez rematado el desmontaje del santuario, la entidad elaborará un estudio geotérmico para conocer el estado de la parcela y, posteriormente, comenzará a redactar el proyecto constructivo definitivo necesario para licitar la obra y que obreros y maquinaria comiencen a operar en la zona. Hasta ahora contaban con licencia municipal por el proyecto básico, pero este 2024 es necesario que desarrolle la propuesta final.
El proyecto requiere de un desembolso de más de 800.000 euros. Una cantidad "importante" que la entidad ya está negociando con diferentes Administraciones, según asegura Pilar Farjas. "El reto está en conseguir la financiación. Que lo hagamos en una fase, en dos o tres, dependerá de las oportunidades financieras", asegura. Por ello, la directora de Cáritas Diocesana de Santiago no se atreve a aventurar una fecha concreta sobre las obras de construcción del centro: "Solo sabemos que no paramos", explica a Quincemil.
Viviendas autónomas con minihuertos
El proyecto consiste en la construcción de una vivienda social para que personas mayores con autonomía puedan vivir "acompañadas y con una buena calidad de vida". El centro incluiría espacio para entre 8 y 12 adultos, así como una casa accesoria para los empleados del complejo.
El espacio contaría, además de las habitaciones, con zonas de uso común como dos aseos, una cocina, un comedor y un ascensor. Es el caso de una sala de usos múltiples que, entre otras posibilidades, podría emplearse para la celebración de la eucaristía. La parcela, de 900 metros cuadrados, guardaría también espacio para zonas verdes que albergarían minihuertos accesibles tanto para los residentes como para los vecinos del barrio.
En total, el proyecto incluye 5 dormitorios dobles, 5 baños y dos dormitorios individuales para los mayores. Todo ello se distribuiría en dos plantas.
La capilla derribada no tenía ningún valor patrimonial reconocido por las Administraciones con competencia en la materia, por lo que su derribo no ha supuesto un problema. Sin embargo, el proyecto prevé mantener parte de la estructura de piedra del santuario para preservarlo como "elemento identitario". Además, la nueva fachada buscará reproducir el frontal de la antigua capilla a modo de guiño.
Acceso a la vivienda en la vejez
Según los datos ofrecidos por Cáritas, el acceso a la vivienda es el primer factor de exclusión social en Galicia con un 35,3% de la población afectada por esta problemática. En este sentido, el 33,4% de los hogares en situación de exclusión en Galicia tiene como persona sustentadora principal a alguien mayor, según apunta la entidad social en base al Informe Territorial 2019 de la Fundación Foessa para Galicia.
Hombres y mujeres están azotados a partes casi iguales por esta situación: 51% y 49%, respectivamente. Además, más del 90% de la población gallega en esta situación tienen la nacionalidad española, un dato que lleva a Cáritas a asegurar que "la exclusión en Galicia está fundamentalmente compuesto por hogares cuyas personas sustentadoras son mayores, varones, con nivel educativo bajo, con trabajo y de nacionalidad española".
Por ello, la entidad se planteó la creación de un centro como el de San Pedro de Visma, destinado a dar servicio a adultos mayores, pero autónomos y sin recursos socio-familiares para asegurar su sustento y evitar la soledad no deseada.