El pasado 4 de marzo se derrumbó un muro, provocando desvíos en el enlace de la Vía Ártabra con la N-VI en Oleiros (A Coruña). Los trabajos llevados a cabo en las últimas semanas han avanzado en la reparación y está previsto que la actuación esté completada tras la Semana Santa.
Así lo aseguran fuentes de la Consellería de Infraestructuras e Mobilidade a Quincemil. Eso sí, la obra podría retrasarse a causa de las condiciones meteorológicas, que no son nada buenas para la Semana Santa.
Desde la Xunta explican que la semana pasada acabaron de reconstruir el muro y que en este momento están con la ejecución del terraplén que está por encima del muro, que se prevé tener terminado esta semana, a no ser que el mal tiempo lo impida.
Una vez terminada esta parte de la obra, ya después de Semana Santa, se ejecutará el firme, barrera y señalización, condicionado de nuevo a las circunstancias meteorológicas.
Para que algo así no vuelva a ocurrir, se adoptaron las medidas necesarias, con un muro más reforzado y mejor trabajado, y con un relleno en el que se intensificaron los controles sobre sus características.
En cualquier caso, la afección al tráfico se ha ido minimizando, según asegura la Consellería, ya que el ramal se mantiene abierto fuera de la jornada de trabajo, y también en momentos de trabajo en los que no influye en la obra.