La borrasca Nelson ha sido la protagonista de la Semana Santa gallega, con frío y fuertes lluvias y vientos, lo que ha provocado cientos de incidencias por todo el territorio. Este lunes sus restos aún dejarán precipitaciones, que podrán ser en forma de nieve a partir de los 1000 metros, además de mantenerse la alerta amarilla por viento en el mar. Con todo, su marcha no dará tregua y este martes, una nueva borrasca volverá a activar la alerta también por viento y lluvia.
La inestabilidad atmosférica ocasionada por la influencia de las bajas presiones atlánticas continuará caracterizando la jornada de este primer lunes de abril, según informa MeteoGalicia, que detalla que la cota de nieve se moverá entre los 1000 metros por la mañana a los 1200 metros por la tarde.
Las temperaturas no tendrán cambios significativos y continuarán en valores bajos para la época del año, con mínimas situadas en los 4 grados en Lugo; 6 en Ourense y Santiago; 7 en Ferrol y A Coruña; 8 en Pontevedra; y 9 en Vigo. Las máximas serán de 11 grados en Lugo; 12 en Compostela; 13 en A Coruña; 14 en Ferrol y Ourense; y 15 en Pontevedra y Vigo.
Por su parte, los vientos soplarán moderados del sudoeste, con intervalos fuertes en el litoral norte y zonas altas del interior, lo que dejará activa la alerta amarilla por viento en el mar.
La situación no mejorará a lo largo de la semana, y este martes la agencia gallega informa de que una nueva borrasca volverá a activar además la alerta amarilla por viento en A Mariña, en el noroeste de la provincia de A Coruña, en el interior de la provincia de Pontevedra, y en la montaña de Ourense, con rachas que pueden superar los 80 km/h.
En el este y suroeste de la provincia de A Coruña a esa alerta por viento se sumará la alerta por lluvia, con acumulaciones de más de 40 litros por metro cuadrado en 12 horas. También estarán activas estas alertas en todo el litoral pontevedrés.
Las temperaturas experimentarán en cambio un ascenso este martes, que será más acusado a partir del miércoles, acercándose a valores más típicos de la primavera. De hecho, de cara al miércoles se espera una situación más estable, con un descenso de la probabilidad de precipitaciones. No obstante, las lluvias no se despedirán en toda la semana.
(TIEMPO)