La empresa encargada del dragado de la ría de O Burgo, en Culleredo (A Coruña), ha realizado este martes una primera prueba de siembra de marisco. Unos trabajos que los mariscadores/as han calificado de "chapuza" por el método elegido para hacerlo, que consideran que "no es factible". El próximo 26 de abril finalizarán las obras y los mariscadores/as anunciaron que no participarían de la siembra si no se garantiza la continuidad de las ayudas durante el tiempo de crecimiento de los bilvalvos.
Manuel Baldomir, presidente de la Cofradía de Mariscadores de A Coruña, ha detallado que la empresa ha elegido un método que "no es factible". El proceso ha consistido en echar el marisco a través de un tubo situado en una embarcación, en vez de depositarlo "en una zona concreta donde tenga que ser plantado".
En ese sentido, explica que el sembrado "debe hacerse en marea baja" de modo que cuando empieza a subir "la marea vaya enterrándolo y así se garantiza que el marisco se quede en la zona en la que se tiene que quedar".
"Entendemos que se deberá cambiar la metodología de siembra. Es una pena que tantas unidades semilla puedan ser arrastradas de forma involuntaria por las corrientes, en vez de quedar depositado exactamente como dicen los bancos marisqueros", ha añadido.
En la misma línea, el portavoz de los marisqueros a pie, Andrés Pena, ha calificado el método de "chapuza". "Ya hay unas zonas que teníamos marcadas con el biólogo para tirar 100 unidades por metro cuadrado, pero lo han tirado todo donde han querido. No nos están escuchando", lamenta. Y pronostica que la semana próxima podría "tirarse ya la cría" porque si no "se va a morir".
Protestas por las ayudas
El colectivo de mariscadores y mariscadoras de la ría de O Burgo lleva semanas movilizándose ante la Delegación del Gobierno en Galicia para demandar al Ministerio de Medio Ambiente la ampliación de las ayudas una vez finalizadas las obras y durante el tiempo que dure la siembra de la ría.
"Demandamos al Ministerio que se siente a negociar con la Xunta de Galicia y con el colectivo de trabajadores el tiempo de parada estractiva que nos vemos obligados a hacer desde que finalizan las obras hasta que el marisco que se siembre coja tamaño comercial", manifestaron en su última concentración a comienzos de mes.
"Al sembrar el marisco y ser de talla inferior y no poder faenar también seguimos afectados por las obras de dragado de la ría de O Burgo y solicitamos que se nos dé una solución", insistió ante una situación que afecta a "cerca de 80 familias".